Posts Tagged ‘nacionalismo’
Respuesta a críticas de Claudio Katz
Un amigo y lector del blog me envió un artículo del profesor Claudio Katz, que lleva por título “Dependencia y teoría del valor”, publicado en Aporrea (aquí). En el mismo Katz critica mi posición sobre intercambio desigual y trabajo potenciado. Dedico esta entrada a responderle.
Maraña de categorías
En las polémicas que tuve sobre intercambio desigual con los defensores de la tesis Mandel – Shaikh – Carchedi (en adelante, MSC) no hubo dificultades para focalizar el tema en disputa: si en las empresas que aplican tecnologías superiores se genera más valor por unidad de tiempo de trabajo que en las empresas con tecnologías modales, o atrasadas. La misma cuestión, en esencia, se planteó en torno a la renta diferencial. Quienes intervenimos en el debate con posiciones definidas sabíamos de qué estábamos hablando. Lee el resto de esta entrada »
La izquierda y Lenin, sobre imperialismo y explotación de países
A raíz de las discusiones sobre la situación en Venezuela, una vez más se puso en el centro de mis diferencias con la mayor parte de la izquierda la cuestión de la “liberación nacional de la explotación imperialista”. Es que lo que sustenta el programa nacionalista de la izquierda es la idea de que Argentina es explotada por EEUU, y otras potencias; y que Venezuela pasaría a ser explotada (o sería más explotada) por EEUU (y otras potencias, pero no China o Rusia) en caso de que cayera el régimen chavista.
En oposición a estas ideas, en notas anteriores (por ejemplo, aquí; también en Economía política del subdesarrollo y la dependencia) planteé que países como Argentina no son explotados por las potencias capitalistas. Los explotados son los trabajadores, no “el país”. La explotación se da en términos de clases sociales, y en los capitales nativos no están sometidos a alguna forma de explotación “colonial”.
Preciso que la explotación colonial es aquella que describía Hobson (1902), y sobre la cual Lenin decía –en El Imperialismo fase superior del capitalismo, p. 75- que se asentaba la explotación del capital financiero, y la inversión capitalista en los países atrasados. Esa explotación colonial adoptaba diversas formas: producción y transporte con uso compulsivo de mano de obra –trabajadores de plantaciones, portadores de cargas en África, etcétera-; economía de trata, que consistía en el monopolio comercial del país dominante sobre monocultivos; impuestos sobre los campesinos y artesanos; y acaparamiento de la tierra por parte de los colonos. A las clases burguesas o pequeñoburguesas nativas –comerciantes y artesanos- no se les permitía comerciar con otras potencias o países en mejores términos; no podían tomar decisiones políticas, económicas, diplomáticas, con un mínimo de autonomía. Lee el resto de esta entrada »
Venezuela y el argumento nacionalista
Como hemos señalado en otras notas, la mayor parte de la izquierda argentina adhiere al argumento con el que Maduro se niega a conceder elecciones libres y libertades democráticas (capitalistas) en Venezuela: está en marcha un golpe de Estado para convertir al país en una colonia yanqui. De ahí que, para esta izquierda –peronismo de izquierda, PC y afines, trotskistas- el eje de la lucha sea nacional (la liberación nacional), no democrático.
Mi punto de vista es muy distinto. Sostengo que hoy no están dadas las condiciones, políticas y sociales, internas e internacionales, para que Washington pueda transformar a Venezuela en una colonia. Por lo cual el “antiimperialismo” es una excusa para amparar la represión a las masas que reclaman libertades democráticas y contra el hambre. En lo que sigue presento los principales argumentos de mi postura. Lee el resto de esta entrada »
Trump y el Nac & Pop criollo, ¿qué balance?
El día siguiente del triunfo de Bolsonaro, y después de tener una charla telefónica, Trump manifestó que “acordamos que Brasil y EEUU van a trabajar muy cerca en asuntos comerciales, militares y todo lo demás”. En respuesta Bolsonaro anunció que visitará EEUU como parte de su primer viaje presidencial al exterior, en el que incluye una visita a Israel, además de Chile. Para contextualizar esta afinidad entre Bolsonaro y Trump, recordemos algunos datos.
Bolsonaro propone “arrancar de Brasil” la influencia “del socialismo” y “del extremismo de izquierda”. En un video publicado en las redes sociales Bolsonaro empuña un trípode como si fuera un arma y dice al público que lo escuchaba “vamos a fusilar la petralada aquí en Arce”. También afirmó que los izquierdistas debieran irse a Venezuela (https://www.hispantv.com/noticias/brasil/387320/jair-bolsonaro-trump-fusilar-partido-trabajadores). Ideas y propósitos muy apreciados por los gobiernos de derecha y ultraderecha, y por Trump en particular. Lee el resto de esta entrada »
El MAS de los 1980 y la tradición nacionalista
A raíz de los comentarios enviados al blog por la nota “Bregman y el compañero Axel” (aquí) se suscitó el debate sobre si el “viejo” Movimiento al Socialismo, orientado por Nahuel Moreno (1924-1987), tenía posturas nacionalistas. Así, un lector recordó que “en los ochenta y noventa, el MAS decía: ‘Las banderas caídas del peronismo, la soberanía política, la independencia económica y la justicia social, hoy las levanta el MAS’…. [el discurso de Bregman] no es más que una continuidad”. Otro lector, sin embargo, negó que el MAS de los 1980 tuviera posturas nacionalistas.
En esta nota mostraremos que el MAS, bajo dirección de Nahuel Moreno, efectivamente desplegó una orientación nacionalista y estatista que lo acercó al peronismo que se reclama de izquierda (y al Partido Comunista). Y que, por lo tanto, la actual postura del PTS con respecto al kirchnerismo tiene raíces de larga data. Pero lo mismo se aplica a las organizaciones y corrientes en que se dividió, en Argentina, el viejo tronco morenista: el Movimiento Socialista de los Trabajadores, Izquierda Socialista, el nuevo MAS, Partido Socialista de los Trabajadores (U), y Autodeterminación y Libertad (Luis Zamora); además de algunos grupos menores, incluido alguno que es chavista. Por eso, cualquiera podrá comprobar –comparando consignas y caracterizaciones del pasado y actuales- que el discurso modelo 2018 sobre la deuda y el FMI de estos grupos es una réplica casi exacta de lo que fue el discurso del MAS de los 1980 sobre esos mismos problemas. Lee el resto de esta entrada »
Salida al mar para Bolivia y nacionalismo
A partir de las discusiones sobre la posición del socialismo frente a los nacionalismos, un compañero chileno, Sebastián, me consultó sobre qué posición deberían adoptar los socialistas chilenos frente a la demanda de salida al mar por parte del gobierno boliviano. Esto considerando que los territorios le fueron arrebatados a Bolivia en la llamada Guerra del Pacífico (1879-1883), promovida por el capital inglés.
Fue una consulta, pero casi inmediatamente coincidimos en que para un socialista el criterio debería ser bajar todo lo posible las rivalidades entre Chile y Bolivia. Por eso, es necesario que los socialistas chilenos se pronuncien sin ambigüedades por la restitución de los territorios arrebatados a Bolivia, que le permitan una salida soberana al mar. En este marco, pensamos que es necesario criticar a los partidos de izquierda que integran la coalición gubernamental por su posición chovinista frente a Bolivia. Es que a pesar de que tradicionalmente la izquierda chilena ha estado a favor de una salida al mar para Bolivia, partidos como el Comunista hoy llegan al extremo de enviar delegaciones parlamentarias a la Haya, junto a representantes pinochetistas y del oficialismo, para sostener como “causa de Estado” la defensa de la “soberanía y la integridad territorial chilena”.
Sebastián me dice también que una postura favorable al reclamo de Bolivia tendrá como consecuencia inmediata estar en oposición a la opinión mayoritaria de la población chilena, y de la clase obrera. Sin embargo, coincidimos en que esto no debería impedir llevar adelante una educación socialista, contra el nacionalismo. El criterio central debe ser que no se mantengan territorios como botines de guerra, y menos todavía cuando esos “trofeos” sirven para inflamar el patriotismo. Lee el resto de esta entrada »
Las secuelas del nacionalismo en la ex Yugoslavia
En varias notas del blog he planteado que exacerbar las pasiones y las rivalidades nacionales no tiene absolutamente nada de progresista, ni de izquierda. Lo he afirmado en oposición a los que piensan que agitando el nacionalismo –incluso inventando relaciones “coloniales” o de “explotación nacional”- pueden desatar una revolución que desemboque, más o menos espontáneamente, en el socialismo. Sostengo también que la formación de una multitud de pequeños Estados nacionales, divididos por el particularismo y la exacerbación nacionalista, puede tener resultados negativos para los trabajadores.
En este respecto, el caso de Yugoslavia es ilustrativo. Tengamos presente que ya en los 1980 se manifestaban en ese país fuertes tensiones étnicas y nacionalistas, en el marco de una economía en deterioro. Con la caída de la URSS el proceso se aceleró. En 1991 Eslovenia y Croacia se independizaron. Y en 1992 Bosnia-Herzegovina y Macedonia también declararon la independencia. El presidente serbio Milosevic trató de impedirlo, y dio comienzo una guerra que se prolongaría hasta 1995. La guerra volvió a estallar en Kosovo, en 1999. A lo largo de esos años hubo desplazamientos forzosos, que afectaron a un millón de personas; violaciones masivas de mujeres; y alrededor de 250.000 muertos. Por supuesto, no hubo ni por asomo algo que se asemejara a una revolución socialista. Lee el resto de esta entrada »