Rolando Astarita [Blog]

Marxismo & Economía

Un militante que es violador no debe tener privilegios

with 44 comments

En los últimos días he tenido varios debates acerca de qué posición debemos adoptar los socialistas ante el caso de violadores que pertenecen a organizaciones políticas  de izquierda, y a organizaciones sociales. Es que me he encontrado con gente que piensa que un militante de izquierda que viola a una mujer debería tener un trato especial por parte de su organización. El discurso, palabras más, palabras menos, es: “el violador-militante es un producto del sistema capitalista y de la sociedad machista; hay que reeducarlo; no es necesario denunciarlo públicamente; la organización debe arreglar el asunto internamente”. En ese marco, incluso se evita llamar a las cosas por su nombre: así, la palabra “violación” es sustituida por “machismo” y “discriminación”, términos mucho más suaves.

Sin embargo, si se trata de un violador común (o sea, “que no es del palo”), esa misma gente habla sin eufemismos de violación; acepta que se haga público el nombre del victimario (en tanto las víctimas estén de acuerdo en denunciarlo); y denuncia a quienes lo encubren. Por ejemplo, la izquierda estuvo en contra del encubrimiento de Dante Palma por parte de Graciela Morgade y la Facultad de Filosofía y Letras (UBA). Recordemos que Palma fue acusado de haber abusado a chicas jóvenes, del ambiente del rock. Asimismo, la izquierda ha denunciado al Estado y a la Iglesia por encubrir violadores, o por ocultar sus nombres a la opinión pública. Además, la militancia se ha puesto incondicionalmente del lado de las víctimas y ha ayudado a que se animen a hablar.

Pues bien, mi postura es que no debe haber diferencias de tratamiento para un violador por el hecho de que sea militante de algún partido o movimiento social. Ser militante de izquierda no otorga ningún privilegio. Más en concreto: si denunciamos “a la camarilla de Filosofía y Letras” por encubrir a un violador “común”, debemos repudiar a cualquier “camarilla militante” que encubra a un violador-militante. Además, hay que colaborar, en todo lo posible, con las víctimas, sean o no de la organización. En particular, si están de acuerdo en denunciar al violador, deben tener todo el respaldo para hacerlo. En ningún caso deben sentir que al hablar están “traicionando la causa del socialismo”, sino todo lo contrario.

Para explicarlo con un ejemplo menos dramático, supongamos que un concejal, militante de izquierda, cobra coimas. ¿Su partido debería ocultar el caso por el hecho de que es un militante? Pienso que no. No es posible decir “nuestro corrupto es un producto del sistema y vamos a reeducarlo calladamente”, al tiempo que denunciamos la corrupción “de los otros” y pedimos que vayan a la cárcel. La postura que defiendo se vincula, lógicamente, a un proyecto de sociedad en la que no haya privilegios para nadie.

Por último, soy consciente de que lo que afirmo aquí me va a acarrear no pocas críticas e insultos. Pero tengo la obligación de decir lo que me dicta mi conciencia. Y lo hago, además, en la convicción de que esta postura, lejos de debilitar, fortalecerá a la izquierda y al socialismo.

Descargar el documento: [varios formatos siguiendo el link, opción Archivo/Descargar Como:
Un militante que es violador no debe tener privilegios

Written by rolandoastarita

29/09/2017 a 11:53

Publicado en General

Tagged with , ,

44 respuestas

Subscribe to comments with RSS.

  1. Acuerdo totalmente.

    Me gusta

    Gerardo Daniel

    29/09/2017 at 12:02

  2. «mi postura es que no debe haber diferencias de tratamiento para un violador por el hecho de que sea militante de algún partido o movimiento social. »

    No puedo creer lo que estoy leyendo. De verdad hace falta escribir un artículo sobre este tema? así de mal está la cosa? eso de la igualdad de los hombres delante la ley no ha llegado a todo el planeta?

    Le gusta a 1 persona

    quimucs

    29/09/2017 at 12:04

    • Tanta falta hace, porque lamentablemente el PO ha encubierto, y sigue haciéndolo a violadores y abusadores.

      Me gusta

      Luric

      26/10/2017 at 22:55

  3. que se deba empezar a discutir desde este nivel ya indica lo dificil que es debatirlo. Lo de los privilegios por ser militante es liminar a un mal chiste. Lo que si se podría debatir en los ámbitos de la izquierda es la relación entre escraches, punitivismo y perspectiva de lucha anti-machista desde lo colectivo. «Limpiar» las organizaciones de los elementos que no esten purificados puede llevar facilmente a la instauración de juzgados y comisiones de persecusión que siempre se mezclan con luchas entre posiciones políticas y ahí se pudre todo.
    Además, es un tema que a los militantes vanguardistas les parece tan importante pues pretenden que la revolución la va hacer su agrupación y por eso esta debe ser lo más perfecta posible. Lo difícil es después hacer el mundo conforme a su agrupación, culpa de lo retrasada que es la clase trabajadora…

    Me gusta

    gomez

    29/09/2017 at 12:26

  4. Hay un bellísimo cuento de un escritor salvadoreño Horacio Castellanos Moya, llamado Némesis que, justamente, trata esta cuestión. Sss

    Me gusta

  5. No se cuál es el contexto de la nota pero recuerda a lo que pasó hace algunos años cuando implosionó la corriente cliffista en Reino Unido. Casi la totalidad de las juventudes del partido se escindió por un encubrimiento de este tipo.

    Me gusta

    Nacho

    29/09/2017 at 16:10

    • Hay muchos casos que se tapan. Y son muchos los que juzgan con doble vara, aquí y en otros lugares. Si una mujer, por ejemplo, denuncia que su padrastro la violó desde que tenía 10 años, la reacción de gran parte de la izquierda será muy distinta si el acusado es una persona común y corriente, a si es un elevado líder de la lucha antiimperialista en América Latina.

      Me gusta

      rolandoastarita

      29/09/2017 at 16:24

  6. Profesor, estoy de acuerdo con el razonamiento general de su nota. Ahora bien, por el caso de Dante Palma (por las dudas le comunico que no coincido en un ápice con la visión de Palma ni de sus intervenciones pro-kirchneristas en 678) tengo entendido que lo suyo no era un caso concreto de violación sino más general de violencia de género con acoso psicológico a su ex pareja.

    De todas maneras no se qué opina al respecto, si le parece atinado o no, de si a la justicia “burguesa” del Estado capitalista, los marxistas podríamos considerarla idónea para la resolución de estas cuestiones -obviamente no estoy hablando de la comisión de un delito penal grave liso y llano como la violación-, y sin perjuicio de que se hagan públicas las conductas de los militantes victimarios, si no está Ud. de acuerdo que lo mejor es un tribunal de honor de la organización a la que pertenezca el victimario, el organismo más adecuado, o ser interpelado por sus pares, es decir por los integrantes de la misma pertenencia social o al menos de quienes dicen defender los intereses de esa clase.

    Gracias

    Me gusta

    José

    29/09/2017 at 16:30

    • No tengo muy claro cuál puede ser una solución aplicable. Pienso sí que el punto de partida es cambiar radicalmente los criterios con que se encara el sexismo y la brutalidad machista al interior de organizaciones sociales y políticas. Sobre los tribunales de moral de las organizaciones, por la experiencia que he tenido, no veo que sirvan de gran cosa. Incluso pueden ser funcionales al encubrimiento y a la represión de las víctimas. Cuando en el Socialist Workers Party de Inglaterra se desató el escándalo por las acusaciones de abuso sexual de un dirigente, se formó una comisión para juzgar el tema. ¿Cuál fue el resultado? Pues que las mujeres víctimas que eran llamadas por el tribunal terminaron denunciando los métodos machistas y el encubrimiento del propio tribunal.
      Aclaro también que Marx estaba de acuerdo en que, en caso de disputas entre militantes, podía recurrirse a la Justicia burguesa (Lenin luego compartiría el criterio). Al menos en casos graves, no se puede descartar. Para poner un ejemplo, supongamos un femicidio cometido por un militante. ¿Lo tiene que juzgar el partido? ¿No hay que denunciarlo a la justicia? Si la respuesta es afirmativa, ¿una violación es un caso cualitativamente tan distinto?

      Me gusta

      rolandoastarita

      29/09/2017 at 16:43

    • El tema es que para juzgar un delito del calibre de una violación y llegar a un veredicto razonable hace falta toda una estructura que ningún partido de izquierda tiene: peritos, psicólogos, psiquiatras, abogados, cámaras gesell, etc. Cualquier intento de juzgar estos hechos sin estos elementos sólo puede recaer en el encubrimiento, el prejuzgamiento o una combinación de ambas. Lo más responsable es llevar inmediatamente el caso ante la justicia burguesa.

      Le gusta a 1 persona

      Lázaro de Tormes

      29/09/2017 at 18:54

    • Ya existe el suficiente conocimiento científico para crear y aplicar políticas al respecto, tanto desde el Estado como en organizaciones. Ya existen profesiones como sexología, psicología, trabajo social, y otras que lidian con los casos de abusos sexuales y existen estudios de la violencia sexual como fenómeno social desde la antropología y la sociología.

      Educación Sexual Integral, discusiones públicas sobre el tema para sacarlo del tabú y redes de solidaridad y contención para las víctimas.

      Me gusta

      La Cagámpora

      03/10/2017 at 20:14

    • El castigo esta mejir situado en el sistema religioso de pecados y penas como castigo. En el punitivismo la pena es retribucion, perdida del bien q los ideologos del sistema penal consideran mas valorado q seria la libertad ambulatoria y siempre un sentido disuasivo y amenazabte para el posible ejecutor del delito. Discrepo no esta tan claro q la sociedad moderna cree violadores. La violacion preexiste y de un corto tiempo a la fecha la repudiamos y sancionamos y argumentamoa en su contra.

      Me gusta

      rperezorue

      03/10/2017 at 22:14

    • Es el patriarcado el que crea violadores, por eso preexiste a la sociedad moderna y persiste en la sociedad contemporánea.

      Me gusta

      La Cagámpora

      04/10/2017 at 20:10

  7. Denunciar a un tipo por quebrar determinados valores que sostenemos , es elemental para que la militancia no sea un pacto de encubrimiento.(aclaro que trato de pensar el tema en un plano académico, por respeto al blog…otra seria mi reflexión y acción si semejante tirifilo como Palma ataca a un ser querido, le aplico la ley del Talion).
    También nos permite apreciar que la coincidencia de ideas y la acción política que son generalmente elementos difundidos públicamente, se sostienen en determinada base moral de valores compartidos que se juegan en planos mas personales y reservados..

    Me gusta

    rperezorue

    29/09/2017 at 16:59

  8. que barbaro…. no hace falta discutir algo tan obvio, el socialismo es el sistema que en última instancia busca terminar con las clases y sus privilegios de clase, sea la que sea………

    Le gusta a 1 persona

    Hector

    29/09/2017 at 17:17

  9. El problema de problemas es que existe algo llamado presunción de inocencia, derecho a defensa e instancia de apelación. En casi todos los casos mencionados en el blog anónimo había un error, o porque nunca fueron siquiera denunciados, o separados del partido o porque el caso estaba en revisión.
    Hay que ser muy cuidadoso en estos casos porque se trata de la vida de personas.

    Le gusta a 1 persona

    Rey

    29/09/2017 at 17:25

    • Esos son elementos de la técnica jurídica de las garantías que protegen a cualquier persona frente a una acusación penal, en un Estado de derecho que reconozca derechos humanos.
      Me pareció que el texto parte del supuesto ya probado (y como decían por allí por la «justicia burguesa» que es la única que se pronuncia con fuerza de verdad legal) de la certeza de que alguien cometió un acto caracterizado por la ley penal como violación.
      Eso presupone que en la situación de un juicio penal, se formulo una acusación, se debatieron pruebas que formaron absoluta convicción para romper el estado de inocencia y que finalmente permitan atribuir el hecho a la persona. siempre con pleno ejercicio del derecho de defensa.
      Ademas que existan las garantías de revisión del proceso y la condena por una segunda instancia imparcial e independiente.
      Pero el estado de inocencia no existe en el aire, ni siquiera como derecho natural en las concepciones del derecho natural de origen divino. Es una ficción dentro del derecho penal de los derechos humanos donde se reconocen garantías que protegen la libertad de las personas contra el actuar estatal punitivo.

      Me gusta

      rperezorue

      29/09/2017 at 18:14

  10. Hola profesor. El texto parece hacer referencia a un hecho real reciente del que no estoy anoticiado. Si es asi, ¿me revela cual es?.
    Saludos.

    Me gusta

    Juan

    29/09/2017 at 20:12

    • Se dio que en las últimas semanas me llegaron noticias de varios casos, algunos de ellos terribles. No quiero por eso particularizar, pero sí poner a discusión el criterio con que se están encarando estas cuestiones. Y al que le quepa el sayo, que se lo ponga.

      Me gusta

      rolandoastarita

      29/09/2017 at 21:40

  11. Sucede que el «las noticias de los varios casos» que cita Rolando se basan en un anónimo que en forma irresponsable divulgó nombres con acusaciones no comprobadas, o, como dije arriba, aún en revisión. Ninguna de estas, hasta donde alcanza mi conocimiento, ha sido realizada en sede judicial y mucho menos condenada en ella.
    Hubiera sido tremendo que la organización en cuestión «escrachase» a esas personas cuando aún no ha terminado ningún debido proceso. No se trata de cualquier acusación sino unas que implicarían el fin de carreras, trabajos, militancias, familias de posibles inocentes. Eso es lo que está en cuestión acá. Sorprende la liviandad con que el profesor Astarita aborda el problema.

    Me gusta

    Rey

    29/09/2017 at 21:52

    • En primer lugar, en la nota no se cita anónimo alguno. La nota tiene un carácter general. Antes de discutir casos concretos, quiero saber si hay acuerdo en el criterio general. Y es en este punto donde lo de «liviandad» parece fuera de lugar. Para que lo entienda hasta el defensor más torpe de los violadores, lo pongo de esta manera: ¿Por qué es «liviandad» sostener que un militante violador no debe tener privilegios? ¿Por qué es «liviandad» pedir que se apliquen para los militantes violadores los mismos criterios que se aplican para los violadores «comunes»? ¿Por qué es «liviandad» pedir que se juzgue a las organizaciones con la misma vara con que se juzga a las «camarillas universitarias» que apañan violadores comunes?

      Que se acuse a la nota de «liviandad» por defender estos criterios es demostrativo de una llamativa «liviandad» para condenar a los violadores… que «son del palo».

      Le gusta a 1 persona

      rolandoastarita

      30/09/2017 at 00:20

    • Es el argumentario típico de los encubridores: no hay denuncia, no hay condena, ergo no hay pruebas (al pasar, tiene bastante similitud con el negacionismo de los genocidios típico de los stalinos). Pero como todos sabemos, hacer una denuncia pública normalmente comporta un proceso de revictimización, al tener que revivir los hechos, soportar los cuestionamientos y ataques, etc. Tampoco la justicia burguesa y las fuerzas represivas destacan por su sensibilidad ni por una atención adecuada a las víctimas. Por todo ello (también por las circunstancias en que se dan estos abusos que dificultan la existencia de pruebas), el testimonio de las víctimas tiene capacidad probatoria por sí mismo. Lo que hay que hacer es acompañar y atender a las víctimas, no perderse en formalismos legalistas que no nos competen.

      Le gusta a 1 persona

      Nacho

      30/09/2017 at 09:29

  12. Profesor una de las razones por las que escribio este articulo
    Fue el reciente caso del abuso sufrido por una alumna durante la toma, ocultado por el centro de estudiantes la mayoria adherentes a la Izquierda(Magali Peralta-PTS)???
    http://m.perfil.com/mobilepages/sociedad/denuncian-un-abuso-sexual-silenciado-durante-la-toma-del-colegio-nacional-de-buenos-aires.phtml
    http://www.infobae.com/sociedad/policiales/2017/09/28/la-alumna-abusada-en-el-nacional-buenos-aires-habia-contado-lo-ocurrido-hace-tres-semanas-en-una-red-social/?outputType=amp-type
    Creo que la Izquierda debe depurarse lo antes posible de esos individuos como tambien de los violentos que en las marchas destruyen locales comerciales, tiran piedras, causan disturbios
    No solo debe delimitarse si no condenar los hechos delictivos que estos realizan en vez de minimizarlos

    Me gusta

    Sergio

    30/09/2017 at 00:05

    • Lo sucedido en el CNBA efectivamente fue lo que disparó la nota. En particular, la nota que publicó Izquierda Diario sobre el asunto. Sencillamente me produjo asco.

      Me gusta

      rolandoastarita

      30/09/2017 at 00:22

  13. Aqui esta
    http://www.laizquierdadiario.com/Estudiantes-denuncian-que-el-rector-del-CNBA-y-medios-usan-un-abuso-para-deslegitimar-las-tomas
    Destaca una peculiar cita
    “apenas se supo de la situación, se resguardó la integridad de la estudiante, hablando con el abusador para pedirle que no viniera más a la toma para no generar una situación incómoda para ella…»
    Y¿ la denuncia? Y ¿el colectivo Pan y Rosas?
    El comunicado del Centro de Estudiantes parece redactado por un obispo encubridor de un cura pedófilo.

    Me gusta

    Sergio

    30/09/2017 at 02:57

    • La discusión interna sirve porque puede permitir que el agresor confiese algo que no haría ante la justicia burguesa ya que no es lo mismo ser expulsado de un partido que ir preso. Esto evitaría la revictimización mencionada más arriba. Luego la denuncia ante la justicia burguesa depende de la víctima. Quiero agregar algo sobre la revictimización. Cualquiera que sufre un delito y debe declarar y participar de un proceso penal se revictimiza porque debe revivir el suceso como mínimo a nivel discursivo. También se revictimiza a los padres que deben acusar al asesino de sus hijos o a la persona que debe acusar a un médico por mala praxis que lo dejó incapacitado (por poner otros dos ejemplos). La demostración de lo que se afirma no es ya un formalismo de la justicia burguesa sino un presupuesto básico del racionalismo. Lo que no quiere decir que la justicia deba ensañarse con la víctima y desconfiar de ella.

      Me gusta

      Lucas

      30/09/2017 at 11:24

    • Una cuestión que me llama la atención: la ausencia de referencias en los sitios de la izquierda a lo ocurrido en el CNBA. Por lo que veo, hoy sábado Izquierda Diario retiró su nota de ayer, y no dice palabra. Tampoco veo que se refieran al asunto otros sitios de la izquierda. Esto a pesar de las fuertes críticas que está haciendo la derecha y los medios a la izquierda y a los estudiantes que se movilizaron contra la reforma educativa. La actitud de la izquierda de no hablar del asunto parece ser una aplicación práctica de lo que critico en la nota. Pregunto: si el acusado de violación en el CNBA hubiera sido una autoridad del colegio, o algún militante de la derecha, ¿habría habido el mismo silencio? El Centro de Estudiantes, ¿habría tenido la misma actitud «prudente» de callar durante casi dos semanas?

      Por otra parte, el alumno acusado de violador fue separado del CNBA. Sin embargo, la izquierda que critica «el punitivismo» no dice palabra sobre esta medida.
      Me gustaría saber qué opinan sobre esto. ¿O es que estoy muy confundido y hay algo que me estoy perdiendo?

      Me gusta

      rolandoastarita

      30/09/2017 at 15:01

  14. Otra cosa. Creo que en el tratamiento de estas cuestiones la organización no puede verse limitada por criterios legalistas. Una organización revolucionaria es una organización de personas libres que se asocian en base a determinadas ideas y principios. La organización debe determinar qué es admisible y qué no. Podría haber conductas que no son delito para la ley pero que sean incompatibles con la pertenencia a la organización. En general, toda conducta que implique pasar por arriba de la libre voluntad de otro para obligarla u obligarlo a hacer algo no querido debería ser inadmisible, más alla de que en un caso grave de violación deba ser expulsado y en algún otro caso menos grave pueda admitirse alguna otra solución. Los privilegios son incompatibles con la militancia revolucionaria. Más aún en el caso de una violación.

    Me gusta

    Lucas

    30/09/2017 at 12:47

    • La organizacion no puede eludir q lo q pretende juzgar esta en el territorio de un Estado y es alcabzado por su ley. Pensar q alquien se puede proclamar fuera de la ley rstatal es pura fantasia q ningun pensador serio puede propo er.

      Me gusta

      rperezorue

      30/09/2017 at 15:16

    • ¿Realmente estás hablando en serio?

      Por ejemplo, para la ley burguesa hay violación cuando existe acceso carnal. Llegó a haber toda una corriente doctrinaria que entendía que no existía acceso carnal si el forzamiento era por la boca (Zaffaroni era uno de ellos). Hoy la ley fue reformada y aclara que el forzamiento a una fellatio es violación. Es decir que la ley tenía, en el pasado, un concepto de violación cuyo alcance era discutido por buena parte de la doctrina penal.

      Una organización revolucionaria no tiene por qué seguir los criterios de la ley penal. Al fin y al cabo tampoco puede aplicar sanciones por fuera de la organización. Es la organización la que las establece y las aplica. Lo hacen todas las organizaciones, de todo tipo, no sólo políticas. Es más, hay organizaciones que prohíben a sus integrantes litigar en la justicia contra la organización y que establecen mecanismos propios para resolver los conflictos. No sólo no se trata de pensadores serios o no sino que efectivamente existen estatutos de organizaciones que tipifican como infracciones a la disciplina de la organización conductas que no lo son según la ley. Una organización revolucionaria puede imponer una sanción a un integrante que le dice una guarangada a una compañera mientras que esa conducta no está sancionada por la ley burguesa como un delito. No existe ningún impedimento para que una organización establezca las normas obligatorias que regirán su vida interna y que dichas normas sean distintas a la ley burguesa. Otro ejemplo, carnerear una huelga es una infracción grave para un militante revolucionario. Para la ley burguesa está ejerciendo su derecho a trabajar.

      Me gusta

      Lucas

      30/09/2017 at 17:39

  15. El que defiende a un compañero violador porque es de la misma organización tiene la misma moral que el policía que esconde a otro policía porque es de la misma fuerza

    Le gusta a 2 personas

    gabrielmagan

    30/09/2017 at 13:46

  16. Lamentablemente sucede a menudo que delitos comunes de personajes importantes de una organización sindical o política son encubiertos con el pretexto de no dañar la imagen de la organización o de no dar ventajas a los enemigos, por ejemplo, a los reaccionarios o la patronal, para que refuercen sus ataques contra la organización. Estos delincuentes se escudan en la organización. Llegan al extremo de buscar apoyo y protección en la organización y, todavía, llegan a la desfachatez de responder a las acusaciones como calumnias de la derecha, de la patronal o de los oportunistas.

    Lo patético del caso es que la organización se presta al encubrimiento. Esto es algo muy natural y muy común en organizaciones sindicales corruptas y pro patronales, lo que está en consonancia con el carácter mafioso de estas organizaciones. Sin embargo, es más triste constatar que el sesgo al encubrimiento también se da muy a menudo en organizaciones políticas de izquierda de carácter reformista y electorero, que han hecho de las luchas obreras y populares un negocio.

    En este tipo de organizaciones políticas es un principio tácito que la vida privada y la militancia política son dos asuntos separados que nada tienen que ver el uno con el otro. Me acuerdo que en una oportunidad que en una célula de formación política se le critico a un camarada obrero su adicción al alcohol. Este respondió airadamente que era una total falta de respeto que se metieran con su vida. Con motivo de este percance se discutió en la célula, durante buen tiempo, los alcances de una moral revolucionaria. Como conclusión de este debate el camarada pidió disculpas y pidió apoyo de la célula para superar su adicción.

    Lo notable del debate es que ningún miembro de la célula se libró del juzgamiento moral. No faltó uno que se puso incomodo al explicar porque dejo a su primera esposa y se comprometió con otra. El camarada reconoció haber cometido errores y que la militancia revolucionaria lo había ayudado a tener una mejor comprensión al respecto. En varias oportunidades recibí diversos tipos de quejas de las parejas de los camaradas, incluidos casos de infidelidad y de agresión física.

    Estoy firmemente convencido que un partido auténticamente marxista y revolucionario debe desarrollar entre su militancia una fuerte tradición de moral revolucionaria. El conocimiento del materialismo, la dialéctica, la lucha de clases, la explotación económica, etc. debe abrir un nuevo panorama y una nueva visión, sobre todo a los militantes nuevos, que influencie muy seriamente en sus vidas, incluso en sus aspectos domésticos, en el sentido de una moral y un compromiso revolucionarios.

    Lenin sostuvo que la actitud que asuma un partido frente a sus errores dice mucho de su carácter revolucionario. Ha habido casos, y seguirá habiendo, que elementos del lumpenproletariado, con costumbres muy arraigadas de ese modo de vida, se asimilan al partido. También es cierto de que muchos de ellos encontraron en la militancia revolucionaria una forma de reeducarse. Asimismo, cuando desde la temprana edad se es parte de formas de convivencia violentas y con falta de respeto por la persona humana, es casi un hecho que con el paso de los años esto se refleje en conductas de crueldad con otras personas como las violaciones. A veces ocurre que estas conductas son irreeducables por más moral revolucionaria que exista.

    A estas personas se las debe denunciar y separar del partido o de la organización sindical. En caso que, en momentos decisivos de acción revolucionaría, provoquen severos daños al partido, se le debe aplicar la pena máxima.

    Me gusta

    Amauta

    30/09/2017 at 15:31

  17. Mi opinión es que el combate contra la violencia sexual y contra el machismo EN GENERAL es ineludible en las organizaciones que se llaman a sí mismas revolucionarias.

    Si una organización garantiza la impunidad de los abusadores en su seno debe ser castigada con un escrache público. El «control de daños» a lo Partido Obrero (falta de solidaridad con las víctimas y hacerlas que se vayan, o si no pueden lograr eso, apartar al abusador pero tratar de que todo quede bajo la alfombra), también es repudiable.

    El punitivismo tampoco debería ser la opción, ya que sería reproducir con una justificación feminista al discurso de la «mano dura» contra la delincuencia, y allí se pierde toda perspectiva transformadora. Pero la crítica al punitivismo no debe ser en favor del abusador, como la he hecho el PO e incluso la FORA, poniendo en las víctimas el peso de «REEDUCAR» a quienes abusaron. La crítica al punitivismo debe ser por su carácter CONSERVADOR de las actuales relaciones sociales.

    Cuando hay un abuso no debe haber impunidad, debe haber justicia y deben tomarse medidas que protejan a las personas del abusador y sobre todo que prevengan futuros abusos. En lo último es donde se nota una total falta de políticas de parte de las «organizaciones revolucionarias», sobre todo el PO, quien pone como excusa que el machismo es parte de la descomposición social del capitalismo y por lo tanto también afecta a la militancia obrera. Pero esto pone el problema en un nivel de «moral revolucionaria» cuando tenemos conocimiento científico al respecto!!!

    Ya existe el suficiente conocimiento científico sobre la violencia de género para aplicarlo en políticas partidarias permanentes de educación y prevención (la mejor manera de prevenir abusos es que nadie quiera abusar). La educación sexual integral cuya aplicación se reclama al Estado argentino en las escuelas se puede y se debe realizar en el seno de los partidos. Esa es la solución a largo plazo.

    La lucha contra el patriarcado tiene que formar parte del programa del partido pero además no debe ser algo que quede en discursos o principios enumerados, debe estar expresados en políticas permanentes al interior de las organizaciones. Los militantes varones no van a desaprender el machismo que llevan adentro solo mediante lecturas y adhesiones a principios, es un trabajo permanente de educación y también de contención (a través de grupos de varones). Si no se empieza esto ahora, entonces siempre se repetirá el mismo esquema de actuar recién cuando se produjo el abuso, y preferentemente de una manera encubridora o escrachando al abusador como chivo expiatorio, lo cual también termina siendo una forma de proteger la organización a toda costa.

    Me gusta

    La Cagámpora

    01/10/2017 at 10:57

    • No se entiende bien a q llamas punitivismo y pq asocias el machismo y la discriminacion a la mujer con la decadencia capitalista. Si por poner un ej. Ya los griegos promovian esta situacion de desigualdad de generos y ni por asomo habia nada parecido al sistema economico capitalismo. No podria haber capitalismo floreciente con igualdad de generos?

      Me gusta

      rperezorue

      01/10/2017 at 12:13

    • Llamo punitivismo a la ideología/conducta que pone el castigo como única o principal solución a un problema. Aun si se castigara a todos los violadores, si no cambiamos la sociedad seguiremos produciendo violadores.

      Yo no asocio el machismo a la decadencia capitalista, es el PO quien lo ha hecho en su respuesta a una carta anónima que denuncia su política interna hacia el abuso sexual.

      Me gusta

      La Cagámpora

      03/10/2017 at 20:10

  18. Es solo una demostración adicional y no menor, de que el interés del aparato prima sobre las consideraciones morales elementales. He sabido y visto varios casos a lo largo de la vida. No son cosas que nos resulten novedad. En el año 2004, si mal no recuerdo, se dio una situación de pedofilia en una fábrica recuperada. Mucha gente fue testigo del asunto. El pedofilo en cuestión, que pertenecía a una organización de izquierda, hasta donde llega mi conocimiento, solo fue separado de la actividad. Un ‘cambio de destino’. Violaciones a militantes? Solo se citan los casos más notorios y que fueron ventilados en los tribunales. Sabemos de muchos que quedaron en la sombra. Una práctica que se asemeja demasiado a lo que ocurre en sectas religiosas donde se aprovecha la sumisión al líder para usufructuar el consenso ‘voluntario’. Hace poco leí que el MST (creo) le enrostraba al PTS la defensa de un militante en un caso de abuso. La excusa habitual es dudar de la víctima. Aducir que no se debe recurrir a la justicia burguesa. Pero si se han pasado la vida recurriendo a la Justicia burguesa por múltiples razones¡ Hasta dirimieron el reparto de fondos provenientes de las elecciones en los tribunales¡

    Me gusta

    AP

    01/10/2017 at 20:53

  19. De acuerdo. Un movimiento que se pretende de izquierda debe ser coherente en TODO.

    Me gusta

    Alejandro Teitelbaum

    02/10/2017 at 02:38

  20. punitivismo, para los que se han preguntado a respecto, es la defensa de las puniciones como herramienta principal para resolver los problemas de orden social. La expresión académica más radical en su contra son los abolicionaistas penales, juristas libertarios que defienden el fin del código penal, mientras que las penas de encarcelamiento expresan hoy el espíritu punitivista, irracional, de convertir un crimen en un «equivalente» de tiempo en prisión en cuanto mecanismo para detener o diminuir los crimenes.

    Aplicado al feminismo y a la izquierda, se trata de pensar que haciendo escraches y expulsando a los que cometen algun tipo de transgresión se resuelve la cuestión del machismo. En su expresión extrema, están aquellxs que defienden que los escraches «empoderan» a lxs escrachadorxs.
    Yo estoy de acuerdo con lo que dice Rolando sobre el doble criterio. Qué se hace con un hombre que acciona de forma violenta con una compañera? Se lo expulsa de su entorno social hasta que pueda seguir accionando así lo suficiente lejos para que no nos enteremos de lo que hace? Le pegamos afiches con su cara para que esa persona se vea completamente aislada del contacto social para el resto de su vida, deje de conseguir trabajo, nunca más consiga una compañera estable?
    Claro que acá no estoy considerando crímenes de gravedad como femicidio o violaciones bajo amenaza de muerte o secuestro — no todos los abolicionistas están en contra del encarcelamiento por principio, me parece que hay situaciones donde es necesario aislar una persona por un determinado tiempo para que la vida de muchos pueda volver a la normalidad.
    No se trata solamente de «reeducación» del hombre violento — cosa que instituciones burguesas ya hacen y están adelante de muchas sectas «radicales» de izquierda–, sino de trabajar la temática cotidianamente; una lástima que algunos sectores de la izquierda piensen que las cuestiones de género con una «moda» actual.

    Me gusta

    gomez

    02/10/2017 at 10:28

    • Muy buena explicacion del punitivismo como lo que se denomina inflacion penal. La creencia de que el sistema penal y la generalizacion de su uso contribuye a resolver problemas sociales. Lo vimos en el caso Blumberg donde el populismo kirchnerista desarticulo un cierto equilibrio de penas y las elevo para dar satisfaccion a la plaza colmada que lo reclamaba. Me parece que hay una cierta confusion con el sentido retributivo de las penas. Si deben ser estatales y ordenadas en un sistema penal o si deben estar en manos de algun comite de honorables sabios del partido o similar. Lo que para mi hay que intentar como propone este blog es reflexionar sobre los temas. Vi por alli una condena a la mano dura al delincuente y pense seguro que este forista no propondra mano «blanda» para el delincuente de guante blanco (politicos empresarios etc) y me pregunto si tambien se justifica la mano blanda contra el lumpen que ataque a un trabajador, lo agrede fisicamente o le roba sus pertenencia y mi idea es que no solo no correponde mano blanda sino que debe ampliarse el campo de autorizacion para la legitima defensa. Ya que en sus origenes el sistema penal estatal logro desarmar a las comunidades con la promesa de resolver los conflictos de manera mas equitativa pero con el fin oculto de quitarles poder de resistencia una vez desarmados. El abolicionismo afirma la inutilidad y otras criticas al sistema penal. Hay muchas variantes maxi postay es una voz muy seria en el tema en Argentina. Mi opinion es que la poblacion debe conocer los fundamentos del sistema penal, sus tecnicas de regulacion, me parexe que el juicio con garantias y buenos jueces es util pero me opongo al sistema carcelario, por elevadisimo costo para la sociedad y por su inutilidad es la universidad y centro de negocios de la delincuencia. Si aplicaria reparacion civil obligatoria de la victima por el victimario y un sistema de control progresivo (terapias medicas control de desplazamientos acotados, etc) hasta verifocar que el condenado llego a un estandar que permita suponer que no volvera a atentar contra la comunidad cometiendo delitos.

      Me gusta

      rperezorue

      02/10/2017 at 10:54

  21. Hola rolando. En que situaciones marx y lenin plantean que se puedan dirimir conflictos entre compañeros recurriendo a la justicia burguesa??

    Me gusta

    Laucha

    03/10/2017 at 08:29

    • Tendría que buscar dónde lo dice, ahora no lo tengo presente. Incluso menciona que Marx también estaba de acuerdo con ese criterio.

      Me gusta

      rolandoastarita

      03/10/2017 at 09:07

  22. me suena a que en el epistolario. sds.

    Me gusta

    Fabián

    04/10/2017 at 00:19

  23. […] de mirar para otro lado. Basta de privilegios para los agresores de izquierdas. Si de verdad se pretende construir un orden social más avanzado […]

    Me gusta


Replica a gomez Cancelar la respuesta