Rolando Astarita [Blog]

Marxismo & Economía

Productividad, inversión y fuerzas productivas

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El debate sobre cómo medir la productividad conecta con la discusión sobre cómo se evalúa el desarrollo de las fuerzas productivas. Para ver por qué, supongamos que, dada una población obrera constante, aumenta la producción de valores de uso por trabajador, y que el valor agregado  por trabajador permanece constante. ¿Cuál de estos ratios debe tomarse entonces cuando se evalúa si hubo, o no, desarrollo de las fuerzas productivas? Por lo que hemos explicado en notas anteriores (véase aquí, por ejemplo), sostenemos que debe tomarse en cuenta la razón producción de valores de uso (o riqueza material) por unidad de trabajo. De hecho, es el criterio que aplicaba Marx.

Pues bien,  el mismo problema se suscita cuando se intenta evaluar si hay desarrollo de las fuerzas productivas por la relación inversión / producto bruto. Es que si se calcula este ratio en términos de valor, se puede concluir, equivocadamente, que las fuerzas productivas están estancadas – o que existe una tendencia al estancamiento. Por caso, François Chesnais, en varios trabajos, se apoya en ese ratio para demostrar que el modo de producción capitalista tiende al estancamiento, por lo menos desde mediados de los 1970.

Pero, como hemos adelantado, ese ratio puede ser engañoso. Es que, por un lado, el valor de las herramientas y equipos puede disminuir, de manera que disminuye la relación valor de las inversiones en equipos y herramientas / producto bruto, pero por otra parte la inversión, en términos reales, puede haber aumentado. Por ejemplo, supongamos que el valor de la herramienta X disminuye a la tercera parte, pero que la inversión de X se duplica. En ese caso, la relación inversión / producto en términos de valores puede bajar, en tanto que la inversión, en términos reales (esto es, en términos de medios de producción), aumentó.

Marx señala esta cuestión en El Capital. En el capítulo 22, apartado 4, se refiere a “las circunstancias que, independientemente de la división proporcional del plusvalor en capital y rédito, determinan el volumen de la acumulación”. Allí explica que si aumenta la productividad “(e)l mismo valor de capital constante se presenta en más medios de producción, esto es, en más medios de trabajo, material de trabajo y materias primas; suministra, por tanto, más elementos formadores de producto y asimismo más elementos formadores de valor, o absorbedores de trabajo. Por ende, si el valor del pluscapital se mantiene incambiado, e incluso si disminuye, se opera una acumulación acelerada” (p. 748, t. 1, edición Siglo XXI; énfasis nuestro).

 La inversión en términos reales en las últimas décadas

 La cuestión de cómo evaluar el desarrollo de las fuerzas productivas a partir de la relación inversión / producto se plantea con toda su agudeza en torno a la discusión sobre el debilitamiento de la inversión en el capitalismo global – y en particular, en los países capitalistas adelantados, EEUU, el área del euro y Japón – y su incidencia en la productividad (véase, por ejemplo, aquí). Todo indica que hubo un debilitamiento a partir de la crisis de 2007-09. Sin embargo, cuando se consideran las últimas tres décadas, y se calcula en términos reales, la inversión se ha mantenido en niveles relativamente altos. Es lo que surge del capítulo 3 – “The Price of Capital Goods: A Driver of Investment Under Threat?” – del World Economic Outlook, abril 2019, FMI.

En este informe se sostiene que en las últimas tres décadas hubo una caída importante de los precios de máquinas y equipamiento. Por eso, si bien desde 2007-09, a nivel mundial, el crecimiento de la inversión se ha desacelerado, cuando se lo compara con los niveles de los comienzos de los 1990, la inversión real en maquinaria y equipo, en relación al PBI real, se ha incrementado significativamente. Esto se debe a la caída de los precios relativos de maquinaria y equipo. Esta caída, a su vez, ha sido ocasionada por el crecimiento más rápido de la productividad en el sector productor de bienes de capital. Este incremento de la productividad estuvo vinculado a los avances en la tecnología informática. También contribuyó que la producción de maquinaria y equipo está fuertemente inmersa en las cadenas globales de valor.

De acuerdo a los datos, citamos en el trabajo, de Penn World Table versión 9.0 para 180 países los precios de maquinaria, equipos (excluyendo transporte) y transporte han declinado significativamente desde 1990 cuando se los compara con el deflactor del consumo. Los precios relativos de la maquinaria y equipos cayeron alrededor del 60% en los países adelantados y 40% en los atrasados. Comparados con 1990, los precios de maquinaria y equipos cayeron en relación al deflactor de consumo en todos los países adelantados, en el 87% de las economías de mercados emergentes y en el 68% de los países en desarrollo de bajo ingreso. Señalemos también que medir los cambios de los precios de bienes que experimentan mejoras sustanciales de calidad, tales como computadoras, equipo de comunicación y similares, presenta enormes dificultades porque no se están comparando bienes iguales.

Por otra parte, los precios de las estructuras residenciales y no residenciales han seguido aproximadamente los precios de los bienes de consumo; y en los países adelantados se han incrementado desde mediados de los 2000 en términos relativos. Los precios de otros bienes de inversión, consistentes en productos de propiedad intelectual, tales como I&D, software y bases de datos, también bajaron, aunque de forma más modesta que los bienes tangibles de los bienes de inversión transables. Por último, hubo una caída dramática de los precios relativos de equipos de computación (como fue el caso del hardware de computadoras, que cayó 90% desde 1990) y, en una menor cantidad, equipos de comunicación (cuyos precios cayeron casi 60%).

Esta evolución apoya la hipótesis de que los avances en la tecnología informática han jugado un rol importante en la caída de los precios de la inversión. Otros casos notables de caídas de precios: entre 2009 y 2017 los precios de los paneles solares fotovoltaicos cayeron 76%. Los precios de las turbinas de viento cayeron 34%.

Caída de la productividad y de la inversión

Por lo dicho en el apartado anterior no se debería perder de vista que, sin embargo, la inversión se debilitó significativamente en la década transcurrida desde la crisis. El World Economic Outlook de octubre de 2018, capítulo 2, señalaba al respecto que el aumento de la productividad en las economías más avanzadas que producen medios de producción se hizo más lento desde la crisis, y que se debilitó el gasto de I&D y la adopción de tecnologías. Por eso también el ritmo de caída de los precios de los bienes de capital (medios de producción) ya se ha hecho considerablemente más lento en las economías avanzadas en la última década. A nivel global, la inversión se mantuvo débil, con la excepción de China. En China la invers ión aumentó del 40% del producto nacional, antes de la crisis, al 50%.

La caída de la inversión a nivel global puede haber estado determinada por menor acceso al crédito, y expectativas débiles de crecimiento y rentabilidad en el futuro. En 2017 la inversión global estaba un 25% por debajo de la tendencia de precrisis. La debilidad de la inversión puede explicar por qué la recuperación fue tan lenta. Esto implicó carencias en equipos de capital y, en la medida en que la tecnología está inmersa en la maquinaria, más lenta adopción de tecnología.

Inversión en los países atrasados

En lo que respecta a los países atrasados (en la terminología del FMI, países en desarrollo y países de mercados emergentes) las tasas de inversión aumentaron significativamente en las últimas tres décadas. Las tasas de inversión real en maquinaria y equipo en estos países casi se han duplicado en las tres décadas previas. Las altas tasas de inversión han sido una razón clave para las tasas de crecimiento significativamente más elevadas de los mercados emergentes y las economías en desarrollo que en las economías desarrolladas. Esto ha provocado una caída de la brecha del ingreso entre estos países. A pesar de esto, estas economías tienen todavía una fracción muy menor de capital en comparación con los países adelantados.

Esa profundización del capital en los mercados emergentes y los países en desarrollo en las tres últimas décadas ha coincidido con las notables caídas, a las que hicimos referencia, de los precios de los bienes de inversión, tales como maquinaria y equipos, en relación con otros precios de la economía, como los bienes de consumo. Sin embargo, se encuentra el mismo patrón si se tiene en cuenta la relación entre los precios de los bienes de inversión y el nivel general de precios del PBI. De conjunto significa una profundización de la acumulación capitalista en el alguna vez llamado “tercer mundo”. En términos globales se expresa en que la participación de estos países – calculada a paridad de poder de compra – en el producto mundial alcanza hoy el 60%.

Para terminar, señalamos tres cuestiones. En primer lugar, la relevancia que tiene el considerar los avances de la productividad en términos de riqueza – valores de uso – generados por unidad de tiempo de trabajo. En segundo término, la incidencia de los aumentos de productividad en los costos del capital, y su relación con la evolución de la tasa de ganancia. Una cuestión que remite a las discusiones sobre cómo opera, o incluso la validez, de la tesis de Marx sobre la tendencia al aumento de la composición orgánica del capital, y la caída tendencial de la tasa de ganancia. Por último, la realidad de la mundialización de la relación capital / trabajo. Esta relación no solo se ha extendido desde principios de los 1980 – con el giro de China al capitalismo, y luego con la caída de la URSS – sino también se ha profundizado. Una evolución que no encaja en la tesis – popular en algunos círculos de la izquierda – del estancamiento crónico, o de la tendencia al estancamiento crónico, del capitalismo.

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Written by rolandoastarita

30/06/2019 a 13:28

19 respuestas

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  1. Estimado compañero virtual: Lo leo siempre. Quiero hacerle una pregunta: a cuánto asciende la deuda actual, total (en monedas extranjeras y pesos) del Estado nacional y los provinciales?
    Una segunda pregunta: aparentemente, el gobierno anterior dejó una deuda de unos 240 mil millones. Si es así ¿entonces no es cierto aquello que el kirchnerismo desendeudó al país? La Fernández se jactaba en decir que eran pagadores seriales. ¿Pagaban o reestructuraban deuda?

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    Guillermo Fossaluzza

    01/07/2019 at 10:25

    • La deuda pública al primer trimestre de 2019, según Ministerio de Finanzas es de 324,9 mil millones de dólares. De ella, el 35,4% es con organismos del sector público; 46,8% con privados y 17,8 con organismos internacionales (principalmente con el FMI).

      Durante el kirchnerismo la deuda total del Estado (Administración central y provincias) bajó de 192 MM US$ en 2004 a 154 MM en 2005. Esa baja se debió a la reestructuración de la deuda, que fue acompañada de una quita importante. Pero por otro lado la nueva deuda emitida ató al Estado a pagar una alta tasa, fundamentalmente por la deuda atada a los cupones PBI (o sea, los intereses se incrementaban a medida que crecía la economía). Por eso no se trató de un desendeudamiento real. Y a partir de 2005 el stock de deuda no deja de crecer, de manera que al finalizar 2015 fue de 240 MM de US$. Esto demuestra que de hecho se pagó deuda contrayendo deuda.

      Lo que sí hizo el kirchnerismo fue reducir la deuda con privados y organismos multilaterales (recordar el pago al FMI con reservas), a costa del aumento del endeudamiento con agencias estatales (ANSES, Banco Central).

      Por otra parte, sobre la composición de la deuda, en 2004 el 75,7% era en US$ y el 24,3% en pesos. Con la reestructuración citada, en 2005 la proporción pasó a 58,9% y 41,1%, respectivamente. A partir de entonces la proporción de la deuda en dólares fue creciendo paulatinamente, de manera que a finales de 2015 el 69,3% de la deuda estaba nominada en US$ y el 30,7% en pesos.

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      rolandoastarita

      01/07/2019 at 11:47

  2. De todos modos, la baja en el valor por medio de producción, no implica necesariamente una baja en la composición en valor del capital, mientras siga creciendo su composición tecnológica. Es lógico que, como el valor es inversamente proporcional a la productividad del trabajo concreto, se debería suponer un abaratamiento constante de los medios de producción, pero al mismo tiempo hay que considerar que la masa de medios de producción por trabajador puede crecer todavía más rápido. Por ejemplo, supongamos un render farm de 200 cpu’s. Luego, el precio de cada ordenador se reduce a la mitad, y además cada uno de ellos aumenta la velocidad de procesamiento por frame; sin embargo, supongamos además que, bajo presión competitiva, la empresa busca bajar todavía más el tiempo necesario para producir un segundo de animación o del proyecto a renderizar, de modo que el número de cpu’s más que se duplica. Entonces el precio de la parte del capital constante invertido en la granja de renderizado aumenta. Si además, dada determinada cantidad de capital (por ejemplo 100), el capital variable disminuye absolutamente, el mismo se reducirá relativamente con respecto al capital constante y el capital global invertido.

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    luisgac

    01/07/2019 at 18:49

  3. Hola Rolando,

    considero estos tres últimos artículos sobre productividad muy valiosos. Ciertamente planteas enfoques sobre determinados temas que cuanto menos relativizan las afirmaciones de otros autores. Un ejemplo es esta nota en la que haces notar que el aumento de la productividad en la fabricación de medios de producción puede esconder una inversión más efectiva oculta tras una inversión aparentemente más pequeña.
    Pero tengo la impresión de que quieres ir más lejos y no tengo muy claro si te sigo. Es cierto que la productividad en valores de uso aumenta sin que aumente el valor agregado por trabajador. Solo con esto, ya tendríamos el efecto a largo plazo de aumentar la plusvalía relativa. Pero pareces dar a entrever que con solo esa posibilidad matemática quedaría demostrado que el capitalismo puede ir tirando, yendo lentamente hacia un límite en el que la plusvalía relativa crece cada vez menos.
    En el párrafo final entiendo que te preguntas si esa productividad creciente en medios de producción pondría en cuestión incluso el aumento en la composición orgánica del capital y la LDTTG. Tampoco lo veo. Eso supondría que cualquier incremento en la producción de unidades de medios de producción es absorbido por otros capitalistas, y eso es imposible. En un momento dado los compradores de esos medios de producción no necesitarán más de ese tipo y los siguientes aumentos de productividad irían hacia el despido de los trabajadores que los producen, volviendo a reactivar el incremento de la composición orgánica del capital.
    No sé si son líneas de pensamiento que tienes abiertas ahora sin estar cerradas, pero algunas veces la posibilidad matemática de algo no significa que eso vaya a ser así. Otros factores entran en juego para cerrar lo que la posibilidad matemática deja abierto. En cualquier caso, no debemos olvidar que el capitalista no tiene un interés especial en producir más valores de uso, él lo que quiere es valorizar su inversión.
    Por supuesto, esto no es nada que haya que explicarte a ti. Ya te digo, si son líneas de investigación que vas abriendo, me parecen muy útiles. Pero si hay algo más, yo agradecería que lo explicaras más claro.

    Gracias y un saludo

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    Fran

    04/07/2019 at 14:12

    • No entiendo por qué, pero tu comentario había ido a «spam». Sí, soy consciente de que el capitalista no produce con el objetivo de producir valores de uso, sino de valorizar su capital. Esta idea es central en Marx y cada vez le doy más importancia. Pienso que es clave para entender la dinámica que lleva a las crisis de sobreproducción. Estoy trabajando muy fuerte en esto.

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      rolandoastarita

      04/07/2019 at 23:00

  4. Buen día. Para un trabajo de historia, estaba buscando los valores de la tasa de leliq en gobierno de alfonsin o de otros encajes remunerados, mi idea es abordar su gobierno con una teoría monetaria marxista y quisiera hacer énfasis en mostrar la inutilidad y lo distorsivo del «control de agregados monetarios» Relacionarlo con las medidas económicas del gobierno actual y anterior (o sea hacer un poco de campaña y concientizar un poco) . El problema esta en que no encuentro datos y no se donde encontrarlos (bueno estoy en el ultimo año de la secundaria).Disculpe si lo moleste y el hecho de esto este publicado acá. Gracias

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    ivanpablovsky

    05/07/2019 at 12:07

    • No conozco trabajos específicos. Cuando necesito consultar sobre política monetaria de los 1980 recurro a las memorias anuales del Banco Central. El enlace es https://www.bcra.gob.ar/PublicacionesEstadisticas/Memoria_anual.asp.

      De todas maneras, es un tema complejo para un trabajo de historia del colegio secundario. Y hubo cambios importantes a lo largo del gobierno radical. Por ejemplo, los cambios que ocurrieron a partir del plan Austral, en 1985 y 1986. Hay que tener en cuenta que antes de la reforma financiera de 1986 el BCRA procuraba controlar la masa monetaria por medio del control de los encajes (había remunerados y no remunerados) sobre los depósitos. Lo que obligaba al pago de intereses por parte del Banco Central a los bancos, dadas las imposiciones obligatorias. Después de octubre de 1986 el BCRA bajó los requerimientos de encajes, y puso más el acento en el control de la masa monetaria mediante operaciones de mercado abierto. Estas cuestiones podés seguirlas a través de las Memorias anuales; se puede ver el constante esfuerzo por controlar la base monetaria como medio para controlar la inflación, y los fracasos (se monetizaba déficit fiscal; más devaluaciones del peso para sostener la competitividad externa).

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      rolandoastarita

      05/07/2019 at 12:49

    • Ya sabia que el tema da para mucho mas; de hecho ya me es un problema bajar a tierra, todos los conceptos pero la ventaja de que sea para el colegio es que no necesito hacerlo tan tan largo y complejo. Gracias por responder.

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      ivanpablovsky

      05/07/2019 at 13:12

  5. Ud. afirma: …»La caída de la inversión a nivel global puede haber estado determinada por menor acceso al crédito, y expectativas débiles de crecimiento y rentabilidad en el futuro.»…. ¿Existe, para Ud. alguna relación «jerárquica» entre las tres categorías? Es muy posible que yo no alcance a comprender, en toda su profundidad, su argumentación pero, francamente, afirmar, como lo hace, que la caída de la inversión a nivel global puede estar determinado por el menor acceso al crédito no lo puedo compartir, teniendo a la vista la serie histórica de los tipos de interés dela FED y del BCE. Me parece obvio que la caída de la inversión depende de la caída de la rentabilidad presente y esperada que el «factor contrarrestante» que Ud. correctamente señala: ….» en las últimas tres décadas hubo una caída importante de los precios de máquinas y equipamiento.»… junto a otros indicados en el capítulo XIV (tomo III) no alcanza a «contrarrestar».
    P.

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    Francisco José Fernández

    05/07/2019 at 13:33

    • Es la explicación que da el FMI. Personalmente, sobre las causas de la debilidad de la inversión, estoy estudiando el tema. No es un tema sencillo. Ya en los 2000, antes de la crisis, se planteó el llamado «puzzle de la inversión»: en la recuperación posterior a la recesión del 2001 la inversión se mantenía débil en EEUU, a pesar de que la tasa de rentabilidad se había recuperado con respecto a la recesión. Estoy estudiando estas cuestiones.

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      rolandoastarita

      05/07/2019 at 15:20

    • Muchas gracias por su respuesta. Continuaré leyéndole con mucho interés a pesar de las diferencias, notables, que mantengo con Ud., de las cuales, no es la menor, su identificación del incremento de la productividad con el crecimiento de las fuerzas productivas (al estilo Marta Harnecker, si se me permite decirlo así) pero, ese es otro debate. En relación con este esperaré a leer sus conclusiones pero, yo buscaría las causas en el terreno del crecimiento y de la ganancia más que en el de la accesibilidad al crédito. Aquí, en el País Vasco, mi banco me insiste todos los días para que solicite un crédito de miles de Euros que me sería concedido a las pocas horas y sin «papeleos» y creo que ni el País Vasco, ni, mucho menos, yo seamos casos particulares, debe ser, simplemente, porque hay ingentes masas de capital en busca de valorización, ¿no?. Habla Ud. de …»la recuperación posterior a la recesión del 2001″… y a mi se me ocurre preguntarle sobre la relación que pueda existir entra esa «recuperación» y la política monetaria de la FED que bajó los tipos de interés a largo plazo desde el 6,5 % de 2001 hasta el el 2 % en 2002 y los mantuvo, incluso más bajos hasta 2005 para subirlos inmediatamente, ese año al 5% y luego al 6% hasta que en 2008 viene la cura de realidad y bajan a menos del 1 % hasta el año 2018, cuando tras, seis o siete años de supuesta «recuperación» suben, tímidamente, hasta el 2,5 % actual y ya hablan de volver a bajarlos…. Bien podríamos hablar de políticas «keynesianas» o «neokeynesianas» o de la «trampa de la liquidez» o de cualquier otra zarandaja a las que nos tiene acostumbrada la academia «mainstream» pero, Ud. y yo creemos saber que por ese camino no avanzaremos mucho. Sinceramente, hablar de «recuperación» y crecimiento de las fuerzas productivas cuando los tipos de interés del BCE están ¡¡por debajo del 0 %!! y ni se atreven a tocarlos a pesar de los anuncios, cuando el 17% de la población activa en la «locomotora de Europa» está empleada en «minijobs» con un salario máximo de 450 € por mes (el salario medio de estos «empleos» está en 295 €) cuando en el estado español el 91% de los contratos de trabajo firmados en Mayo han sido «temporales» y de los indefinidos el 31,4 % lo son «a tiempo parcial» y para el gobierno «en funciones» del PSOE se trata de un gran éxito porque hay 84.075 parados «registrados» menos aunque la tasa de paro esté en el 13,6 % y el total de parados «registrados» siga por encima de los tres millones y no sigo porque, me temo, que ya les he aburrido bastante.

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      Francisco José Fernández

      06/07/2019 at 08:01

    • Nunca «identifiqué» aumento de productividad con crecimiento de las fuerzas productivas. El aumento de la productividad es uno de los elementos que hay que tomar en cuenta al hablar del desarrollo de las fuerzas productivas. Por caso, la producción global de un país puede aumentar sin grandes avances de productividad, como ocurre cuando la acumulación es de tipo extensivo. Otro problema, por supuesto, es que ese tipo de desarrollo de las fuerzas productivas tiene límites (como lo probó el caso de la URSS).

      Por otra parte, entre 2002 y 2007 hubo una recuperación de la economía de EEUU. La recuperación se reflejó en el crecimiento del producto. Esto es objetivo. No se puede negar que hubo recuperación por el hecho de que las tasas de interés eran anormalmente bajas. La realidad es que creció el producto global y el producto por habitante. Además, la baja de la tasa de interés coincidió con un período de abundancia de liquidez y debilidad de la inversión. Es una situación muy similar a la que Marx llamaba «plétora del capital». No se trató de políticas esencialmente keynesianas. En cambio en la zona del euro y Japón hubo estancamiento, o crecimiento cercano a cero. De nuevo, el criterio para evaluar es el crecimiento de la producción. Los salarios bajos no indican necesariamente estancamiento. Más bien durante largos períodos el desarrollo de la producción de riqueza, bajo el capitalismo, va acompañada del aumento de la explotación, y de salarios estancados o incluso en baja (también ocurrió en la Unión Soviética, a pesar de que no era un régimen capitalistaa, entre 1930 y mediados de los 1950).

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      rolandoastarita

      06/07/2019 at 10:16

    • Muchas gracias, otra vez, por su respuesta, la estudiaré con atención.

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      Francisco José Fernández

      06/07/2019 at 12:29

  6. »Por otra parte, entre 2002 y 2007 hubo una recuperación de la economía de EEUU. La recuperación se reflejó en el crecimiento del producto. Esto es objetivo. No se puede negar que hubo recuperación por el hecho de que las tasas de interés eran anormalmente bajas. La realidad es que creció el producto global y el producto por habitante».
    Bien, pero eso es solo la »mitad del problema»: la economía de un país (o de cualquier otro sujeto económico) debe crecer. La otra mitad de la cuestión, de la que debe hablarse si o si, y no omitirla, cuando se dice si un país crece o no, es el de la desigualdad. Es decir, ¿que individuos y empresas están creciendo exactamente en ese país? No estoy encima de esos datos, pero una idea aproximada es que la desigualdad en esos años, y hoy, creció. Tal como el resto del planeta, por otra parte. Por, tanto, ¿de que recuperación económica estamos hablando? Será la recuperación de elites-clase capitalista y monopolios, y será recuperación a costa de mayor explotación de clases trabajadoras. Termino: no sucede ese incremento de la desigualdad social sólo desde 2002 en Usa, sucede, y desde los ochenta, en todo el Sistema-Mundo. La caída de la participación de la renta salarial en el PIB, lo demuestra. Entre una multitud de datos más que así lo avalan. Es consecuencia del retroceso, la regresión, el paso atrás del modo de producción socialista. Paso con un primer impulso (Ragnar Frisch, Rosa Luxemburg, etc..) dado en 1.917. Le diría que, además de ser un retroceso del modo socialista, se trata de la fase descendente de un ciclo de Kondratiev (ciclo Kondratiev igual a ciclo revolucionario, ciclo lucha de clases) pero ese comentario sería ya un verdadero, largo y pesado off-topic,…
    Saludos,

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    antonio

    07/07/2019 at 12:58

    • Dos observaciones. Primero, el desarrollo de las fuerzas productivas bajo el capitalismo tiende siempre a ir acompañado del aumento de la desigualdad social. Más precisamente, de la polarización social -desaparición de la clase media, pequeñoburguesía, proletarización y concentración del capital. Por eso a Marx jamás se le ocurrió negar que había crecimiento económico porque aumentara la desigualdad social. Esto es elemental.

      En segundo término, he discutido el tema de la tendencia del capital al aumento de la desigualdad social en otras notas, en especial en el largo trabajo dedicado a las tesis de Piketty. Sobre esta cuestión, es necesario precisar que la desigualdad en el modo de producción capitalista ha tendido a aumentar claramente desde los 1970. Sin embargo, la desigualdad a nivel mundial ha disminuido en las últimas décadas. Este argumento lo han presentado varios economistas, con la intención de desacreditar la tesis de Marx sobre la tendencia al aumento de la polarización social bajo el capitalismo. Puede verse, por ejemplo, The Great Escape: Health, Wealth and the Origins of Inequality, de Angus Deaton. También están los datos de Sala i Marti.

      Por supuesto, un dogmático puede responder a la derecha «no tienen razón porque Marx dijo que no pueden tener razón». Si están satisfechos con eso, pues bien, no tengo nada más que decir. A los que no les satisfaga esta respuesta, los remito a la nota en que trato ese argumento, aquí.

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      rolandoastarita

      07/07/2019 at 14:06

  7. en los países que siguen desarrollando las FFPP al ritmo mundial , las ramas nuevas absorben el trabajo que se pierde en las que se van centralizando y depurando.. Argentina no es el caso. Desarrolla la productividad del trabajo, pero a un ritmo mucho menor a la media mundial, lo que pone a cada vez más capital por debajo de la productividad media ?
    ES cierto eso?

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    juan

    28/11/2019 at 14:32

    • Sí, la productividad de la economía argentina es baja. No solo por equipos y tecnología; también por infraestructura, por ejemplo en transporte y logística.

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      rolandoastarita

      29/11/2019 at 11:55

  8. Hola Rolando. Te hago una consulta: ¿qué indicadores son buenos para considerar el desarrollo del capitalismo en profundidad en un país además de la evolución de la productividad por hora y del stock de capital?

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    BoyBlue

    29/01/2024 at 00:30

    • Con esos elementos es suficiente. De hecho Marx consideraba que el mejor indicador del desarrollo de las fuerzas productivas es la inversión en capital fijo.

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      rolandoastarita

      30/01/2024 at 15:39


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