Rolando Astarita [Blog]

Marxismo & Economía

Intelectuales y académicos por Scioli, contra el voto en blanco

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Por estos días recibí un mail enviado por la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, con la resolución de su Consejo Directivo llamando a apoyar a Scioli en el balotaje. En ella se alerta sobre el riesgo “del retorno a políticas neoliberales, privatistas y excluyentes de las mayorías populares”. Por eso decide convocar “a la comunidad educativa a defender las conquistas” y “alertar sobre probables políticas de ajuste y mercantilización, inspiradas por el explícito neoliberalismo de uno de los proyectos en pugna en el balotaje electoral”. Se trata, sigue el texto, del mismo neoliberalismo “que sumió en la pobreza material y cultural a millones de argentinos hasta llegar a la crisis sin precedentes de 2001”. Se informa también que la resolución tuvo el apoyo “de todas las expresiones políticas representadas, a excepción de los consejeros del Partido Obrero”.

También en la Universidad de Quilmes se hizo circular entre los alumnos y docentes un mail en el cual el Departamento de Economía y Administración convoca a apoyar al candidato oficialista. “[C]omo integrantes de la comunidad de profesores, investigadores, estudiantes, graduados, becarios y personal administrativo y de servicios de la Universidad Nacional de Quilmes, consideramos necesario manifestar públicamente nuestra posición sobre las perspectivas de país que se abren para los próximos cuatro años”, afirma. El eje del argumento es la mejora del presupuesto para las universidades, y la UNQUI en particular.

Dado que en otras notas he presentado argumentos a favor del voto en blanco, es obvio que no me siento representado por ninguno de estos comunicados (doy clases en ambas facultades desde hace años). Reafirmo entonces lo que escribí en otras notas: desde una perspectiva socialista no hay ninguna razón para preferir a Scioli o Macri. El viejo criterio del marxismo –véase aquí– se aplica a la actual situación. Los trabajadores no ganan nada apostando a pequeñas y sutiles diferencias entre los candidatos, tan sutiles y pequeñas, que hay que buscarlas con lupa. Agregando que el estatismo burgués cumplió, a lo largo de estos años, un rol reaccionario con respecto a la clase trabajadora de conjunto (véase aquí).

Pero la campaña para votar por izquierda al candidato oficialista está con las velas desplegadas. Y los que nos oponemos, somos considerados poco menos que traidores a la patria. Además, cualquier tipo de argumento parece servir. Como botón de muestra: un reconocido intelectual de izquierda, Atilio Borón, llama a votar al oficialismo, entre otras razones, porque Scioli “muy probablemente seguirá con la política kirchnerista de no reprimir la protesta social. Y no me parece que para cualquier militante de izquierda esta sea una diferencia insignificante” (https://www.facebook.com/permalink.php?story_fbid=1059493484102915&id=158512757534330). Aunque Scioli afirma que tendrá “tolerancia cero hacia los piquetes”. ¿Cómo cuadra con el argumento Borón? Vaya uno a saber. ¿Quieren otro argumento estilo “sociología Borón”? Pues que Scioli viajó a visitar a Fidel Castro, en tanto Macri llamó por teléfono al embajador de EEUU (sic). ¿Y los delegados de Scioli a la asamblea del FMI, a sondear en Wall Street y Washington el ambiente? Nada, Borón nos va a decir que Beim y Urtubey andaban de vacaciones. Pero… ¿y si aplicamos el criterio “recibir apoyo de Castro” a Videla, Idi Amin, Mengistu, Sassou-Nguesso, Mugabe y personajes semejantes? Entonces nos van a responder que esa actitud mental es propia de quien “vomita su odio contra las revoluciones realmente existentes” (sic, cualquier parecido con el argumento tradicional del stalinista tradicional no es casualidad). Con la conclusión, lógica en las concepciones nacional-stalinistas, de que la izquierda que llama a votar en blanco es “aliada del imperio”. Y así discurren los discursos de los oportunismos de toda la vida.

En cualquier caso, y a los efectos de colaborar a la elaboración de futuros, sesudos y esclarecedores comunicados de las altas autoridades académicas de las facultades en las que trabajo, y de los intelectuales afines, aquí van algunos datos de complemento.

Salarios

En 2011 el salario real promedio en Argentina era más bajo que en 2001. Con un índice 100 en 2001, en 2011 se ubicaba en 98,9. El dato lo presenta Emiliano López, “La situación económica de las clases subalternas en la Argentina post-neoliberal (2003-2011)”, en Cuadernos de Economía, Año 1 Nº 1, octubre 2014. López elaboró el índice en base a datos del INDEC, Ministerio de Economía y Finanzas, CENDA y Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Deflactó los salarios reales hasta el año 2006 con el IPC-GBA del INDEC; entre 2007 y 2011 utilizó el índice de 7 provincias construido por CENDA (era dirigido por Axel Kicillof). Y desde 2011 hasta la actualidad el salario promedio se ha estancado.

También en el estudio citado se muestra que en 2011 los trabajadores pobres eran el 15,7% del total. Esto resultaba de tomar como parámetro los trabajadores que recibían un ingreso familiar menor de la Canasta Básica Total calculada por el INDEC. La proporción de trabajadores que recibían en 2011 ingresos por debajo del salario mínimo vital y móvil vigente en ese año era el 43,7%. En 2011 los salarios de los trabajadores públicos habían bajado, con respecto a 2001 (índice 100) a 71,16 (trabajo citado). ¿Hay que recordar que los salarios de estos trabajadores dependen directamente del Estado?

Agreguemos que, según el INDEC la mediana del salario es $5500. Aunque todo hace pensar que el organismo “infló” los ingresos de los trabajadores informales (habrían aumentado más que los ingresos de los trabajadores formales, en condiciones de estancamiento de la economía).

Trabajo precarizado

El empleo no registrado como por ciento del total fue del 33,9% en 1993; 37,5% en 1998; 34,3% en 2011; 34,4% a fines de 2014, según datos del INDEC. Esto significa que hoy hay 4,1 millones de trabajadores en condiciones de informalidad (considerando como tales los que no realizan aportes previsionales; aunque hay más formas de trabajo precario). Esta cifra no toma en cuenta a los cuentapropistas que tienen empleos en negro; según estimaciones privadas, si se incluye estas personas, el trabajo precarizado llega al 42%. De manera que el número de trabajadores en condiciones precarias rondaría, en total, los 7 millones. Según el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina, en 2013 el 49% de la población ocupada no tenía aportes provisionales; esto daría 7,9 millones de trabajadores precarios (insistiendo que existen otras formas de trabajo precario).

Pobreza

En 1999, esto es, al final de la presidencia de Menem, el índice de pobreza era del 26,7%. Según el Índice Barrial de Precios, la canasta básica que define el nivel de pobreza era, en septiembre 2015, de 7377 pesos mensuales para una familia tipo. La Canasta Básica Alimentaria era de 3250 pesos. Usando esta metodología, el Centro de Investigaciones Participativas en Políticas Económicas y Sociales, (CIPPES) ubica el nivel de pobreza, en el segundo trimestre de 2015, en el 26,7% y el de indigencia en el 5,5%.

Según Jorge Sola coordinador del Observatorio de Datos Económicos y Sociales de la CGT, la cifra de pobres en el país es de 12 millones de personas; teniendo en cuenta que el mínimo para una familia tipo (4 integrantes) es de $8600. Para el Observatorio Social de la UCA la pobreza en 2014 alcanzaba al 28,7% de la población, que equivale a casi 11,5 millones de personas. De acuerdo a la CTA oficialista, en abril de 2014 la pobreza era del 17,8% de la población, 7,5 millones de personas; estimaba la canasta de pobreza, en 4267 pesos.

Según la Comisión Técnica de la Junta Interna de ATE-INDEC, usando la metodología tradicional que venía utilizando el organismo antes de la intervención, y solo corrigiendo los precios de los productos, la pobreza alcanza al 25,1% de la población y la indigencia al 5,6%. De acuerdo a Cynthia Pok, si se hacen los ajustes metodológicos y se incluyen otros productos de consumo necesarios, hay un 44% de pobres y un 11,3% de personas que no alcanzan a cubrir la canasta alimentaria

Situación en el sector de la salud

Como complemento de lo anterior, presento extractos de una carta abierta dirigida a Scioli y Macri por el Consejo Ejecutivo Nacional de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (Fesprosa), que acaba de publicarse, en la que plantea que el debate presidencial no puede eludir los temas sanitarios. Reproduzco las partes que se refieren al diagnóstico de la situación en salud.

“Los indicadores de salud colectiva reflejan una situación social que marca la persistencia de severos déficits, no superados durante el ciclo de crecimiento económico que comenzara en el 2003 y que hoy se encuentra detenido.

No ha habido mejorías sustanciales en indicadores sensibles que hacen a la situación socio sanitaria: niños y niñas bajo la línea de pobreza, niños y niñas bajo la línea de indigencia, tasa  de mortalidad infantil, tasa de mortalidad materna y embarazos adolescentes. Podemos afirmarlo a pesar de las dificultades para el diagnóstico producidas por la tergiversación cuando no destrucción de las estadísticas oficiales. (…)

La Argentina gasta en salud entre el 8,5 y el 10% del PBI. La deformación de las estadísticas públicas impide hoy tener valores confiables y precisos. El sector público consolidado (nación, provincias y municipios) invierte solo el 2,6% del PBI, es decir, del 25 al 30% del gasto total en salud. El 85% de ese gasto lo siguen aportando las provincias. El gasto de bolsillo de la población (medicamentos, insumos, aranceles, seguros privados, copagos) supera el 40%. El sistema público de salud en la Argentina cuenta con 1.500 hospitales y 6.000 unidades sanitarias. El sistema posee 70.000 camas de internación (52.000 menos que al finalizar la gestión de Carrillo en 1954).

Los planes focales, aplicados verticalmente como paquetes promovidos por los organismos financieros internacionales, no han solucionado los grandes problemas de la salud.

No mejoraron las tasas de mortalidad infantil y materna. El Plan Remediar no disminuyó el gasto de la población en medicamentos. El Plan Nacer y luego el SUMAR no impactaron positivamente en las tasas sanitarias y agravaron la precarización laboral.

Las tercerizaciones y las privatizaciones fragmentaron y debilitaron al sistema público de salud, sin ofrecer respuestas.
Un ejemplo paradigmático ha sido el fracaso de la privatización del Hospital Materno-Infantil de Salta.

El Sistema de Formación de Posgrado se encuentra en crisis.
El síntoma más elocuente es que no se cubren más del 25% de los cargos en las Residencias del equipo de salud.

Situación de los trabajadores de la salud.
En la Argentina, en el Sector Público, trabajan 300.000 agentes (profesionales, técnicos, administrativos y personal de apoyo). Siendo la salud una actividad relacional de índole humano-intensiva (gente que atiende gente), la situación de los trabajadores se convierte en un nudo crítico de las políticas sanitarias.

El 30% de la fuerza laboral está precarizada, con provincias que alcanzan el 80% (San Luis) o superan el 50% (Santiago del Estero, Formosa). El principal programa del Ministerio de Salud de la Nación, el plan de médicos comunitarios, hoy en vías de reconversión, tiene al 100% de su fuerza laboral precarizada, con bajos sueldos y cobro irregular. En el Hospital Posadas se encuentran precarizados el 70% de los profesionales. La situación persiste a pesar de la desprecarización de treinta mil trabajadores de todo el país gracias a la lucha de las regionales de FESPROSA.

En muchos casos los salarios se encuentran por debajo del valor de la canasta familiar regional (canasta básica total), y en algunas provincias, como Santiago del Estero, por debajo de la canasta alimentaria. La baja tasa de sustitución del salario por el haber previsional (40%) lleva al envejecimiento de los planteles, dado que los trabajadores postergan al máximo el momento de su jubilación.

Las condiciones laborales antes descriptas, el deterioro edilicio y la violencia intra y extra institucional, conforman un cuadro que impacta negativamente en la salud de los trabajadores de la salud. Hoy se reconoce al desgaste laboral crónico y los riesgos psicosociales como parte del propio proceso de trabajo en salud. (…) En el orden nacional no existe una instancia de negociación colectiva entre el Estado y sus trabajadores. A ello se suma la ausencia de instancias de negociación en muchas jurisdicciones provinciales y municipales, unida a la falta de libertad sindical”.

El deterioro del medio ambiente impacta negativamente en la salud colectiva
El 5 de junio de 2015, varias ONGs, colectivos sociales del país, Cátedras de la Universidad Pública y profesionales de la salud, el derecho, las ciencias sociales y agrarias realizaron una presentación ante el SENASA a fin de que inicie el procedimiento de Análisis de Riesgo de todos los registros con el principio activo Glifosato, conforme lo establece el Punto 3 del Capítulo 18 de la resolución SENASA 350/1999. El glifosato fue declarado como «probablemente cancerígeno para los seres humanos» (Grupo 2A) por el informe del mes de marzo de 2015 del Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer, órgano que actúa dentro del marco de la Organización Mundial de la Salud. Las evidencias epidemiológicas en los pueblos fumigados y la resolución de la OMS hacen necesarias  la prohibición inmediata del glifosato y el 2,4D.

La «Megaminería a cielo abierto» es una de las más devastadoras formas de extracción de materias primas minerales (oro, plata y cobre principalmente). Tiene enorme impacto negativo a nivel ambiental, social, económico y cultural. Sus efectos más nocivos son el agotamiento del agua, la contaminación de los bienes comunes, la pérdida de la biodiversidad, la destrucción del paisaje y la destrucción de las economías regionales. La utilización y liberación de sustancias tóxicas constituye un grave riesgo para la salud de la población, como acaba de demostrarse en Jachal”.

Todo esto se da en tanto en la última década el país recibió una extraordinaria renta, producto de la suba de los precios de las materias primas. Según cálculo de El Cronista Comercial, solo lo recaudado por retenciones en 14 campañas equivale a 149.458 millones de dólares. Sin embargo, no se generó ningún cambio significativo en la estructura económica: la misma sigue siendo la típica de un país dependiente y tecnológicamente atrasado. Incluso los principales  pilares del crecimiento –el complejo sojero, el complejo maicero, la megaminería y el complejo automotriz- son herencias del menemismo (en el cual participaron, además, tantos y tan destacados miembros del actual gobierno, empezando por los Kirchner y el propio Scioli). Aunque para algunos destacados intelectuales de izquierda, lo que importa es que Scioli le haya dado la mano a Raúl Castro. Como decía Hegel, la medida de un espíritu la da aquello en que se satisface.

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Intelectuales y académicos por Scioli, contra el voto en blanco

Written by rolandoastarita

10/11/2015 a 17:25

56 respuestas

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  1. Excelente tu analisis rolando. Si tuviera argentino, votare por que e importante de votar, pero votare blanco

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    Salama

    10/11/2015 at 17:36

  2. Excelente y oportuno análisis y buena crítica de la sociología simbólica (Scioli le dio la mano a Raul Castro)

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    Teitelbaum

    10/11/2015 at 17:56

    • No tengo otra manera de comunicarlo.
      Para Venancio Andreu Baldó: en esta sección no publico notas o artículos. En todo caso envíe un comentario con un enlace a la nota.

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      rolandoastarita

      10/11/2015 at 19:59

  3. Impresionante informe. Algunos datos me han sorprendido hasta a mi. Es el reverso del relato: La Realidad.

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    AP

    10/11/2015 at 20:29

  4. Adicionalmente una pregunta: El Consejo Directivo de Sociales y sus cofrades quilmeños temen perder la silla, el manejo de los curros o es solo despiste intelectual?

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    AP

    10/11/2015 at 20:33

  5. Rolo, ¿hay algún término para significar a los funcionarios de gobierno u otras dependencias del estado que basan su apoyo al gobierno por su propia conveniencia personal y la disfrazan con piruetas ideológicas? Pienso que tal vez se lo pueda distinguir del funcionario más técnico o de carrera. Muchos funcionarios que entraron por decisiones políticas durante el kirchnerismo saben perfectamente que todo esto del proyecto nacional y popular son macanas pero aún así lo apoyan, sin decirlo, en base a su interés personal por la posición a la que accedieron. También se puede dar en el caso de intelectuales que sostienen discursos en base a las becas que reciben…No sé qué pensás.

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    Juan

    10/11/2015 at 22:46

  6. Rolando que opinión tenes sobre otros intelectuales Marxistas, como Atlio Boron y Eduardo Sartelli. tenes relacion con ellos

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    GAB

    10/11/2015 at 23:05

  7. Y ¿cual es la alternativa? déjeme adivinar, un nuevo estallido social como en el 2001(avalando el «cuanto peor,mejor») un nuevo argetinazo pero con la diferencia que esta vez las masas oprimidas tienen al FIT que los va a salvar del infierno. le prometo que no me ofendo si además de sus cómodas criticas de vez en cuando propone algunas ideas para abordar esta compleja situación que nos toca vivir a los habitantes de este país.Saludos

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    tano

    11/11/2015 at 01:10

    • Además de este comentario, ¿podría mandar uno con algún argumento que trate los argumentos de la nota?

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      rolandoastarita

      11/11/2015 at 08:54

    • Hay muchas alternativas a no ser un lamebotas, tano.

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      Danilo Castelli

      11/11/2015 at 12:07

    • Y delegar en un tercero la elaboración de «ideas para abordar esta compleja situación que nos toca vivir a los habitantes de este país» me suena bastante cómodo también. ¿Vos no vivís en este país?

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      Danilo Castelli

      11/11/2015 at 12:09

  8. ¿Y el desempleo?

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    Restaurador

    11/11/2015 at 06:30

    • El desempleo al final del gobierno de Menem era del 14,5%; hoy es del 6,6% (subocupación del 9%). A primera vista, dado este crecimiento del empleo, debería llamar la atención la escasa mejora de los índices de pobreza o trabajo informal, que registro en la nota. Pero además, para aceptar que la tasa actual de desempleo es la que dice el INDEC, hay que aceptar, por ejemplo, que hay plena ocupación en Resistencia, que la desocupación en Formosa o Misiones es menos del 2%, o que en todo el Norte el desempleo promedio es menor del 3%. ¿Hay que ser ingenuo para tragar semejante cosa? Tal vez sea la condición necesaria y suficiente para decidir que el «proyecto nacional y popular» desarrolló poderosamente las fuerzas productivas en Argentina, a partir de una gigantesca movilización de recursos y aumento del trabajo productivo. En fin, todo es cuestión de afinar el relato.

      Pero volvamos un momento a las mediciones del INDEC. ¿Cómo es que se obtienen resultados tan asombrosos como los de Resistencia? No tengo la respuesta completa, pero hay algunas cosas a apuntar. La primera, es que se cuenta como empleados a todos los que reciben un plan de desempleo (en cualquier país estos cuentan como desempleados).

      Pero la segunda, y más importante, es que el índice de desempleo se elabora sobre la población económicamente activa. De manera que se excluya de esta última a toda persona que, por desaliento, dejó de buscar trabajo. Más precisamente: el INDEC no cuenta como integrante de la PEA a todo aquel que dejó de buscar trabajo por lo menos durante el último mes y medio en que se hace la encuesta. Por eso, si se tomara en cuenta el promedio de la PEA a nivel mundial, que es del 50%, la tasa de desempleo en Argentina sería del 16% (cálculo IDELAS-UCES). Lo cual encaja bastante bien con los datos sociales presentados en la nota; o con el hecho de que 3,6 millones de niños están cubiertos por la Asignación Universal por Hijo.

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      rolandoastarita

      11/11/2015 at 09:35

  9. Profesor porque no arma un partido con Danilo Catelli , AP y unos cuantos mas. seria interesante ver un partido Marxista no Trotskista con peso en la argentina, yo lo votaría y estoy seguro q muchos de los visitantes del blog también

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    tano

    11/11/2015 at 10:46

    • Intenté durante años formar un grupo político basado en las ideas que expreso en el blog; incluso AP participó, al menos durante varios años. Fracasó. Las idas y vueltas del emprendimiento no las puedo explicar aquí, pero pienso que la razón fundamental del fracaso es que no logramos convencer a casi nadie de las ideas que defendíamos. Cuestiones tales como el nacionalismo («Argentina es una semicolonia y está planteada la segunda independencia»), o el estatismo burgués (las estatizaciones son en sí progresistas), son prácticamente intocables. A esto hay que agregar que buena parte de la izquierda adhiere a la tácticas del programa transicional (se llega a extremo de defender consignas como el control obrero del Ejército). Todavía podría sumar otras cuestiones, como la tesis del estancamiento crónico del capitalismo; o la idea de que la URSS, China, etcétera, de alguna manera fueron «estados obreros»; o «socialismos reales». Incluso desde el punto de vista teórico, la tesis del capitalismo monopolista, o del dominio de las finanzas sobre la producción, y semejantes, son casi «de sentido común» en la izquierda establecida.

      La realidad entonces es que no solo no convencimos a casi nadie, sino también tengo que reconocer que estas posiciones siguen dominando. Hace poco leía un escrito de un reconocido marxista argentino que decía, por ejemplo, que la caída del precio del petróleo fue organizada por EEUU para acabar con el chavismo y perjudicar a Cuba (el hombre debe de pensar también que el imperialismo organizó la caída del precio de la leche para perjudicar a Nueva Zelanda; o que en los 1990 organizó la caída de los precios del petróleo para joder a los gobiernos neoliberales, y así de seguido). Pero ideas de este tipo son aceptadas como naturales, tienen amplia aceptación en el público de izquierda «políticamente correcto», y son las que arman el enfoque general de la política (lo de Atilio Borón se inscribe en la misma línea). No tendrán punto que ver con la teoría del valor y El Capital, pero a la mayoría eso los tiene sin cuidado. Es más fácil explicar las cosas por vía de adefesios teóricos de este calibre.

      En definitiva, si surgiera alguna organización que se acercara a las posiciones sustentadas en Marx (o sea, básicamente, la lucha de clases, la crítica al Estado, la idea de que la emancipación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos, la teoría de la plusvalía y la crítica al capital), ayudaría en la medida de mis posibilidades (contando que tengo 64 años). Pero por ahora no veo que se pueda superar el puñado de militantes.

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      rolandoastarita

      11/11/2015 at 11:21

    • Tano. Podés leer lo que sigue y después estimar si nos votarías, o lo que es más importante, si militarías por la construcción de un partido ‘no trotskista’ para que algún día tenga peso en Argentina.

      NI CONTINUIDAD DEL PROYECTO NI CAMBIO: ¡ES CAPITALISMO¡
      Para el 22 de noviembre hemos sido convocados a un nuevo episodio de la farsa electoral. Ahora somos invitados gentilmente a elegir el próximo verdugo entre los dos más votados. A vos que estás harto de escuchar charlatanes hablando por televisión sobre cómo votando te van a mejorar la vida, te queremos explicar que esas ilusiones no tienen fundamento. Puro verso para que delegues el poder de decisión en quien gobernará, como siempre, en favor de los que te explotan, en la fábrica, la obra o la oficina. Vivimos en una sociedad capitalista y en esta impera una ley económica que ninguna política puede cambiar: Los propietarios de los grandes medios de producción que emplean a millones de trabajadores asalariados, son los que en realidad mandan. Para disimular este hecho, los capitalistas apelan a un mecanismo llamado ‘democracia’ en que cada par de años, los trabajadores, que son la abrumadora mayoría de la sociedad, ‘eligen’ entre una casta variada de políticos profesionales, el que habrá de gestionar su explotación más eficiente y la defenderá por medio de la represión si los obreros se rebelan. Esta realidad no se cambia con votos, por ejemplo a un partido que se dice defensor consecuente de los derechos obreros. Si esto alguna vez ocurriera…..se acabó la democracia. La respuesta sería una represión en gran escala hasta que se restableciera el orden necesario para que sigan funcionando normalmente los negocios capitalistas. Muchos trabajadores presienten que votes a quien votes, la explotación, la miseria, la opresión que se vive todos los días no van a cambiar sustancialmente. Por eso se resignan al criterio de lo ‘menos malo’ en la falsa suposición de que tal o cual candidato podrá ser algo más benévolo, sustrayéndose aunque sea un poco a la ambición de los de arriba, de los millonarios, de los poderosos. La realidad es que esto no va a pasar. Tanto Macri como Scioli te van a curtir el cuero. Tras los versos de campaña, te van a encajar el ‘ajuste’, es decir la vieja receta conocida que se aplica cada vez que el sistema capitalista está en problemas: sacarte a vos para que ellos se la lleven más en pala que nunca. Por todo lo expuesto llamamos a no concurrir a votar, anular el voto metiendo una proclama revolucionaria en el sobre, votar en blanco. Es la única manera a nuestro alcance de no ser cómplices de una nueva estafa y mostrar aunque sea nuestro repudio. Enfrentemos el ajuste, venga de la mano de Macri o de Scioli, con resistencia y lucha: Por la defensa del salario, de los puestos y condiciones de trabajo. Por la autodefensa frente a la represión. Por el agrupamiento del pueblo trabajador en organizaciones políticas que luchen por la revolución socialista.

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      AP

      11/11/2015 at 21:46

  10. Muy interesante el planteo y muy contundentes los datos. De todos modos como habitante del conurbano profundo no necesito demasiada data para percibir la crisis que padecemos. Día a día convivo con la pobreza, con pibes que se me desmayan en el salón por estar mal alimentados, etc. Mi inquietud reside en el hecho de pensar de que manera podemos sumarle militancia a un proyecto realmente transformador, revolucionario, anti-capitalista y socialista en una sociedad fuertemente atravesada por ideologías de corte reformista y populista. En ese sentido pienso que quizás lo de Borón sea un guiño al militante peronista para acercarlo al proyecto socialista. Por lo menos en la reflexión que leí de el deja en claro que la solución a esta terrible crisis del sistema en su conjunto solo se dará con la superación del capitalismo. Con esto no quiero decir que la estrategia sea llamar a votar a Scioli, no lo se. Sino que es necesario pensar desde la izquierda de que manera sumamos militancia a proyecto que requiere del cuerpo de todos los laburantes para avanzar en la construcción de otra sociedad. ¿que pensas al respecto?

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    Lean

    11/11/2015 at 11:37

    • Mas allá de que pedís la opinión de Rolo, no me pude aguantar dar la mía. Borón no solo llama directamente a votar a Scioli, sino que reproduce constantemente errores groseros en sus análisis (por ejemplo, en las cuestiones vinculadas a las relaciones comerciales entre naciones capitalistas). Muchos de esos errores son marcados en este blog. Sin embargo, la mayor parte de los marxistas siguen adhiriendo a propuestas de «marxismo a lo Borón», sin atender a los críticos. Creo que el primer paso para construir una alternativa política es la claridad en los planteos, es decir, no intentar «vender» el marxismo a peronistas (o a quienes, hoy por hoy, no son marxistas), sino marcar claramente el carácter de clase y los límites de clase del programa del peronismo (y, en general, de todos los planteos de alianzas de clase) y sus diferencias irreconciliables con el programa del socialismo científico. Y el segundo paso, es estar abierto a la crítica y la reflexión sobre los propios planteos teóricos, para poder avanzar en el conocimiento científico y no repetir dogmas. Creo que en este blog se cumplen ampliamente esos dos pasos, aunque sea una herramienta débil para sumar militancia.

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      Gus

      11/11/2015 at 13:40

  11. Excelente análisis con datos contundentes!

    Me gustaría hacer una consulta sobre la forma en que fue calculado el número de trabajadores informales.

    Según la EPH (cobertura urbana), en Argentina en 2014 hay aproximadamente 11 millones de ocupados, por lo cual el 34% de los informales no podría ser de 7 millones.

    Considerando como trabajadores informales a quienes, en el marco de un empleo en relación de dependencia, no perciben aportes jubilatorios, en el tercer trimestre 2014 (en base a los datos de la EPH-INDEC ) hay un 33.6% de trabajadores informales (calculado sobre el total de asalariados).
    Los asalariados son el 76,2% (8.383.463) del total de ocupados, y dentro de ellos el 33,6% son informales, por lo cual los trabajadores informales en Argentina serían aproximadamente 2.816.843 .

    ¿El numero 7 millones se debe a que se está considerando el total país incluyendo zonas rurales? ¿A partir de qué fuente?

    Gracias!

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    Mariana

    11/11/2015 at 13:04

    • Tenés razón, está mal ordenada la presentación de los datos. La población ocupada es de aproximadamente 16 millones de personas. De ellos, unos 12,3 millones son asalariados. Con el 34% de trabajo informal (no hacen aportes previsionales, aunque hay otras formas de informalidad) tenemos algo más de 4 millones de personas. A su vez, si se toma en cuenta el conjunto de la informalidad, ubicándola en el 44%, da 7,1 millones (siempre considerando informalidad al que no realiza aportes, aunque existen otras formas de informalidad). Si se considera el cálculo de la UCA, que dice que 49% de la población ocupada no hace aportes, tenemos 7,9 millones. Voy a corregir en la nota.

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      rolandoastarita

      11/11/2015 at 13:41

  12. Soy un atrevido e ignorante (si quieren) pero me permito expresar mi opinión si no es molestia.

    Sobre la crítica a su camarada Borón no puedo abogar, supongo que él
    mismo dará su replica en algún momento.

    Sobre «Salarios»

    Según sus estudios, que humildemente yo no puedo comprobar ni
    rechazar me surgen algunas preguntas. ¿Como es posible que si los
    salarios reales promedio de 2011 eran iguales a los de 2001 no vivimos
    la misma situación de 2001? Cabe recordar los saqueos, piquetes, y
    muertos de 2001 que llevaron a la reunincia del Presidente, pero en
    2011 nada eso pasó. Entonces me atrevo a desconfiar (humildemente)
    del análisis, o por lo menos obervar que hay otras variables
    conyunturales. No creo posible que el pueblo haya sido sedado con 678
    y Tinelli para evitar lo que fué el 2001 en 2011. Tal vez hay cuestiones
    que no se han tomado en cuenta, como el corralito, la gigantezca
    deuda producida para intentar mantener la mentira de la convertibilidad,
    la apertura indiscriminada de importaciones, entre otras, no son
    tomadas en cuenta y por lo tanto no explican las diferentes situaciones
    vividas en los años comparados.
    Tampoco se toma en cuenta la posibilidad de la distribución de la
    riqueza, es posible que en 2011 ¿los ricos ganaran menos que los
    pobres, y los pobres menos que los ricos? Según el autor no es posible.
    Sin embargo no explica donde ha ido el dinero de la AUH implementado
    en 2008 siendo aportado por los jubilados más ricos.
    Es posible que alguna de las cosas que aca digo puedan ser refutadas
    con números y estudios que no puedo comprobar, pero entoncés como
    se explica el consumo de 2011 con respecto al de 2001, ¿se puede
    hacer una comparación?, ¿como se explica el estallido de 2001?.

    Soy de los crìticos del IDEC, y creo que fue una de las peores
    decisiones del kirchnerismo, entiendo que se ha ahorrado millones en
    deuda, pero el costo polìtico de no poder confiar en ninuna estadìstica
    es muy alto. Si no podemos creer en el INDEC, ¿por qué podríamos creer
    en una institución del coservadurismo extremo como es el opus dei
    (UCA)?, ¿qué garantias tengo de poder confiar en otras instituciones
    que no conozco? Claro debería informarme en cada una de ellas a
    fondo, cosa que por tiempo no puedo hacer ahora. No soy un
    intelectual ni un profesional, pero creo en lo que veo. Yo en 2011 no vi
    la misma situación que en 2001, entonces no puedo decir que son
    iguales. Algo no se toma en cuenta.

    Pobreza

    Nuevamente, ¿qué me hace confiar en los números del opus dei? ¿o
    incluso de la burocracia sindical?. Al no poder confiar en ellos tanto
    como en el INDEC, y no ser ni sociólogo ni economista, tengo que
    confiar en mis ojos. Mis ojos ven la pobreza, veo gente en situación de
    calle, veo la pobreza de NOA. Pero por qué en los 2000’s veía un
    cartonero cada dos cuadras y hoy veo uno por dìa?, camino la misma
    distancia y los mismos lugares. Algo no me cierra. Ya sé es subjetivo mi
    punto de vista, pero nuevamente ¿como se explica el estallido de 2001
    cuando la consigna era piquete y cacerola la lucha es una sola con
    respecto a las «marchas de los dólares» producidas en los últimos años?.
    Yo he visto ambas, y se nota realmente la diferencia entre un pueblo
    con hambre y un pueblo pidiendo por sus privilegios.

    Situación en el sector de la salud

    Arranca con una carta del Consejo Ejecutivo Nacional de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (Fesprosa)

    ¿Cual es la comparativa entre 2001 y 2011 en inversión en salud? Solo indica lo que se invierte actualmente.

    Así como me resulta dificil tomar como válido al 100% números de diferentes instituciones, incluyendo al INDEC. Me resulta difícil no creer que la carta de Yabrowsky no sea tendenciosa, personaje combativo que incluye declaraciones como «La CTA va a estar en la calle durante todo el 2014». En otras declaraciones dice que la mortalidad infantil sigue en dos dìgitos ocultando que ha bajado.
    No toma en cuenta que se ha defendido la ley de medicamentos luchando contra los grandes laboratorios y estados unidos que exigían la ley de patentes. No reconoce el plan de vacunación actual, ni la generación de vacunas producidas en argentina antes importadas.

    Me resulta sospechoso que el autor solo cite a Yabrowsky dando por sentado que sea todo cierto sin hacer una crìtica ni estudio ni una coma al respecto.

    Para finalizar termina con la banalización del simbolo de darle la mano a Fidel por Scioli en vez de llamar a Estados Unidos por Macri.

    Entonces, ¿no hay otros factores a tomar en cuenta?
    ¿Es eso sucifiente para decir que son iguales?

    No hay un análisis sobre la diferencia o igualdad entre el proteccionismo y la apertura de mercado. No hay un análisis de las conquistas sociales como el matrimonio igualitario contra «son enfermos».
    ¿Da igual un dólar administrado con devaluación controlada vs mega devalución y liberación del dólar?
    ¿Es lo mismo diseñar y fabricar satélites de comunicación vs «heladeras en el espacio»?.
    ¿Nos resulta idéntico la ley de fertilización asistida a estar en contra?.
    ¿Como podemos pedir justicia por Mariano Ferreyra y luego decir que da igual el fin de la ley de punto final y obediencia debida y los juicios a los genocidas contra el olvido y perdón prometido por Macri?.

    Hay muchos ejemplos de ese tipo, pero no son tomados en cuenta. Mi humilde opinión. Respeto la decisión de votar en blanco, lo que no termino de aceptar es decir que son lo mismo. Digan que no le gusta ninguno, pero no son lo mismo.

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    Marcos Casoetto

    11/11/2015 at 13:42

    • Trate de ser más breve. Por otra parte, no tengo manera de responder a un comentario que se basa en sentimientos subjetivos. Solo podría sugerirle que trate de ordenar los hechos: la crisis estalla recién al final de 2001, y el estallido no se debe en principio a salarios bajos, sino a la recesión + corralito + crisis de la convertibilidad. Por eso el promedio de salarios de 2001 no es afectado por la crisis. El aumento vertiginoso de la pobreza se da entre finales de 2001 y tercer trimestre de 2002, cuando llega al 56%. A partir de la recuperación, la pobreza también baja rápido: de hecho, la tasa de caída de la pobreza fue mayor desde el tercer trimestre de 2002 a mayo de 2003 (presidencia de Duhalde) que en el período mayo 2003 al final de la presidencia de NK. Lo cual no se debe a habilidades especiales de Duhalde, sino a la dinámica de la crisis y su recuperación.

      Por supuesto, como usted solo tiene en cuenta sus sentimientos, desecha todo dato que los contradiga. Si los datos del personal despedido del INDEC, de CGT, de CIPPES, de Observatorio de UCA, no encajan en el relato «oficial», todo debe ser obra del opus dei y de la burocracia sindical. Lo mismo sucede con datos que presenta una Federación de Médicos (en este punto, lógicamente, no hay que preguntarle a la gente cómo es atendida en los hospitales públicos del Gran Buenos Aires; todo sea en aras «del relato» de las diferencias «sustanciales»).

      Frente a esto, no tengo mucho para decirle; solo me queda la impresión de que su opinión está lejos de ser «humilde». Aunque podría dar más datos. Por ejemplo, comparar la evolución del Índice de Desarrollo Humano (ONU) entre los 1990 y 2000, para mostrarle que ni siquiera aquí hay diferencias tan grandes (ver aquí).

      Tres cuestiones finales: a) no fui yo quien consideró un dato relevante que Castro le haya dado la mano a Scioli. Lo incluyen en el análisis político. Todo un argumento, digno de gente sentimental. b) Si no hiere sus sentimientos, puede averiguar qué porcentaje del Frente para la Victoria se abstuvo en la votación del matrimonio igualitario. c) No sabía que Macri había incluido en su programa el perdón a los genocidas. ¿Será para imitar al Menem de los 90? Gran argumento entonces para votar a Scioli. ¿Quién puede olvidar la heroica resistencia del candidato oficialista a la amnistía de Menem?

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      rolandoastarita

      11/11/2015 at 14:09

    • Muchas gracias por la respuesta. Digo humildemente ya que no soy intelectual, ni siquiera un estudiante. Pero si me gusta leer. De todas maneras no me cierra, parecería inducir a que en 2011 estábamos igual que 2001, habría que hacer el ejercicio de intentar encontrar las mejoras que no son anunciadas a propósito en la nota. ¿Acaso que no todos voten una ley significa que dicho partido no la haya presentado y llevado a cabo? ¿La nulidad de la ley de obediencia de vida y punto final es acaso un logro del Macrismo? Me pregunto como puede ser que (no digo por usted) tantos militantes de la izquierda insistan con la idea de que Scioli y Macri son exactamente lo mismo, sin encontrar matices e incluso algunos llamando a Macri de «centro-izquierda», y hasta algunos con intenciones de votarlo, me sorprende realmente. Que no les guste ninguno es totalmente comprensible, ni siquiera Scioli es el mejor de los Kirchneristas, se sabe; pero ¿iguales?. Le pregunto a usted que contesta con certeza y no con videoarchivos que minimizan el debate a dos o tres declaraciones de uno u otro.

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      Marcos Casoetto

      14/11/2015 at 04:14

    • No entiendo por qué para la izquierda los «matices» deberían definir apoyos políticos a candidatos burgueses. Sin entrar a discutir quién propuso tal o cual ley, o tal o cual medida (por ejemplo, si usted toma como «criterio de decisión» quién propuso e impulsó la Asignación Universal por Hijo, ¿a quién vota?) la izquierda puede defender avances concretos, en caso de que estén amenazados, sin por ello defender a los gobiernos o partidos burgueses. Ejemplo: defendemos el derecho al divorcio sin por eso apoyar políticamente al gobierno de Alfonsín. Defendemos la educación laica sin identificarnos por eso con el roquismo. Y así podríamos seguir. Sobre estas cuestiones, ver por ejemplo aquí.

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      rolandoastarita

      14/11/2015 at 08:40

    • Una de las diferencias en relación a la protesta social de 2001 con la «paz social» de 2011 es el peso en aquel entonces de la desocupación.

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      El Flaco

      22/11/2015 at 18:47

  13. Que pasa Danilo Castelli, te gusto que siempre cuando comento algo andas agitando. por lo otro si vivo en el país no estoy en condiciones de irme y tampoco me iría , si leíste mi otro comentario veras que propuse que Astarita arme un partido con algunos visitantes del blog y otras personas, y como me suena «bastante comodo» opinar del comentario de un tercero, ¿me imagino que vos debes tener un millón de “ideas para abordar esta compleja situación que nos toca vivir a los habitantes de este país” no? no te apures te escucho atentamente…

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    tano

    11/11/2015 at 13:51

  14. Muy buena nota, complementa perfecto con los datos de los consultoras.
    Un gobierno burgues nunca ayuda a los trabajadores y nunca los salvaria; es increible como la gente se come el cuento, mas alla de los que tienen algun beneficio economico de mayor o menor grado con el gobierno; no entiendo como el resto de la gente simpatiza con el estatismo burgues, no lleva a nada.

    Saludos

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    Leandro

    11/11/2015 at 15:34

    • Y vos que no te comes el cuento con quien simpatizas, y según vos¿con quien debería simpatizar la gente para que los lleve lejos?

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      Mat

      11/11/2015 at 16:57

    • Intentemos no hacer preguntas redundantes, que no llevan a nada. Si alguien se opone a los candidatos debido a su carácter de clase y los intereses que representan, es obvio que recomienda simpatizar (o adherir) a ideas de izquierda, posiblemente al marxismo. No se necesita demasiada inteligencia para deducir esto.

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      rolandoastarita

      11/11/2015 at 17:04

  15. Salario mínimo en 2003: 250$, precio del dólar: 3.17$. Salario en dólares: 79U$D

    Salario mínimo en 2015: 6060$, precio del dólar 13.90. Salario en dólares 436U$D

    ¿No da esto un panorama de cierta recomposición progresiva de la distrubición del ingreso? Más allá de las subjetividades, digo

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    Severian

    11/11/2015 at 16:05

    • El dato que presenta no dice nada sobre la distribución del ingreso, sino sobre el salario en 2003. Pero en la nota se compara el salario actual con el de 2001, esto es, antes del estallido de la Convertibilidad. El estudio de Emiliano López que se cita registra esa evolución: caída del salario con la crisis, luego recomposición, pero sin superar los niveles del 2001.

      Por otra parte, el cálculo no hay que hacerlo en términos simplemente del salario mínimo (como se dice en la nota, gran parte de los trabajadores hoy no llegan a ganar el mínimo). Y además la evolución del salario no debe medirse solo en términos de dólares (en ese caso, habría habido una gran suba del salario con el menemismo, luego de la crisis de 1989).

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      rolandoastarita

      11/11/2015 at 16:14

    • Desde 2001 ( antes de caída real del salario) hasta 2014 el salario real subió 6% para los empleados en blanco y 1% para empleados en negro.

      Haz clic para acceder a Informe%20Empleo%204to%20trim%202014.pdf

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      cecilia

      11/11/2015 at 16:35

    • para ser precisos, el salario m. v. y m. en 2015 es de $ 5588, que al dolar a 15 mangos te da 372,5. recuerdo que a mediados de los 90, como laburante fabril percibía un salario mensual de 450 pesos mensuales, que medido en dolares eran 450 (1 peso un dolar), hoy el salario promedio de la mayoría de los asalariados se calcula en 6500 mangos, que con el dolar a 15 te da 433,3 dólares. Tamaña evolución salarial medida en dólares la de los laburantes en estas décadas!!!!! saludos.

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      motoblues

      12/11/2015 at 00:21

  16. Gracias a ambos.

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    Severian

    11/11/2015 at 18:19

  17. Gus, me parece teóricamente correcto lo que planteas sobre la postura política que debe tener un marxista. Uno de los grandes desafíos que tenemos es poder dejar en claro las limitaciones teórico-políticas de movimientos de corte populista o de cualquier otro tipo de legitimación del capitalismo. Creo que esto amerita una estrategia producto de una evaluación rigurosa de los métodos que tiene la izquierda revolucionaria para intentar sumar militantes y de las condiciones subjetivas de los sectores que pueden sumarse a un proyecto revolucionario. De lo contrario mantendremos esta tendencia a generar rechazo y fraccionamiento en relación al resto de la clase trabajadora. Y con esto no me refiero a que hay que abdicar a los postulados marxistas para sumarse a proyectos socialdemócratas, sino que tenemos que ser autocriticos como vos lo planteas, reconociendo que por mas marxistas que seamos estamos intensamente atravesados por por la miseria de la cultura dominante. Pienso que tenemos que buscarle la vuelta a la cuestión de la pedagogía que utilizamos para intentar generar conciencia de clase, sino, comencemos a pensar de que manera un puñado de marxistas hacemos la revolución antes de que la barbarie arrase con todo.

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    Lean

    11/11/2015 at 18:44

    • No es por aguar la fiesta pero me voy a permitir recordar que el socialismo es la etapa superior de una economía capitalista avanzada y que no es posible que sobreviva en un solo país. Por lo tanto ni el responsable de este blog ni sus lectores serán testigos del mismo. Le ha tocado a nuestra generación ser un eslabón mas de la larga cadena de emancipación del proletariado que lleva ya casi dos siglos. Sea. Nuestra responsabilidad, no menor, es construirlo lo mas fuerte posible. Para hacerlo, el imperativo categórico de esta hora es apoyar en el balotaje presidencial al candidato que mas favorezca la primera condición enunciada mas arriba. Votaré, por lo tanto, por la profundización de la política de desarrollo industrial, científico y técnico del actual gobierno. Votaré por el candidato del Partido Justicialista Daniel Scioli. E invito a los camaradas a seguirme en la seguridad de que no habrá socialismo sin proletariado ni proletariado sin industria.

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      José Mercado

      12/11/2015 at 07:05

    • Incluso razonando con sus premisas, su argumento no se sostiene. La cuestión es sencilla: la clave del desarrollo de las fuerzas productivas en el capitalismo pasa por la reinversión del excedente en trabajo productivo. Esto es, por la inversión productiva (es la idea clave de la economía clásica, y también en Marx; es el eje en torno al cual se realiza la distinción entre trabajo productivo e improductivo).
      Pues bien, la tasa de inversión bajo los gobiernos K fue de alrededor del 20%; que fue aproximadamente la misma que en los 1990.
      El análisis materialista debe basarse en tendencias actuantes, comprobables. Lo demás es pura especulación.
      Por supuesto, esto sin entrar en el resto de las consideraciones que aconsejan, desde un enfoque marxista, no apoyar a ninguno de los candidatos burgueses que se presentan.

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      rolandoastarita

      12/11/2015 at 09:03

    • PARA LUCAS: Si se ponen textos completos, por más interesantes que sean, se desvirtúa esta sección. Pediría que en todo caso hagas una síntesis y remitas a la fuente.

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      rolandoastarita

      12/11/2015 at 21:14

  18. No vivo en Argentina pero mi voto de conciencia fue nulo para las elecciones del 25 de octubre y lo mismo será para la segunda vuelta. Debe quedar claro que los comunistas no recusan de modo absoluto el criterio del mal menor. En 1932 los comunistas alemanes con Thalmann a la cabeza habían acumulado un importante capital electoral. Lastimosamente, desatendieron los concejos de los bolcheviques de hacer alianza con los socialdemócratas para cerrarle el paso a Hitler y los nazis, con el criterio equivocado de que ambos eran de la misma calaña. Hitler en el poder extermino a balazo limpio las 4/5 partes del partido del terco de Thalmann.

    Bajo determinadas circunstancias es necesario pactar con un sector menos peligroso de la burguesía para evitar el exterminio de la esencia revolucionaria del movimiento popular. Así mismo, seria valido apoyar a un sector más débil de la burguesía si eso va a significar un significativo y real avance del movimiento proletario-popular y del movimiento revolucionario.

    El caso es que no esta en agenda, por el momento, de parte de los sectores más cavernarios de la burguesía en Argentina el exterminio de nadie. No son tan tontos como para gastar pólvora en gallinazo. Mucho menos en gentes como Altamira y Del Caño que no ofrecen ningún peligro al sistema, más bien son funcionales al mismo. En la argentina actual no hay la posibilidad de un desborde revolucionario que le quiete el sueño a la burguesía.

    La pregunta cae por su propio peso: ¿qué ventajas reales, practicas, objetivas, etc. obtendrán las protestas sociales y las organizaciones revolucionarias de un eventual gobierno de Scioli? consideraciones como la industrialización del país, el matrimonio homosexual, las prostitutas, el indulto a los genocidas, etc. son temas absolutamente subalternos.

    Una pregunta más directa: ¿en que medida un eventual gobierno de Scioli brindaría mejores condiciones para los preparativos de un alzamiento revolucionario del pueblo? (mis excusas si alguno se incomoda con este tipo de expresiones, sucede que soy del marxismo insurreccional, de los pocos que aun quedan). Por el contrario, que los revolucionarios llamen a votar por Scioli lo único que lograría sería generar una grave confusión en la conciencia política de las masas obrero-populares, con el agravante de que durante dicho gobierno es casi seguro que se aplicaría un duro ajuste contra el pueblo, en consonancia con la agravación de la crisis económica, Nada tiene que ver esto con acumulación de fuerzas, más bien es un suicidio.

    Entonces: ¿donde y como acumulamos fuerzas? impulsando las protestas obrero-populares y su centralización; y levantando un programa obrero-popular alternativo al neoliberalismo, que sea el resultado de una cumbre de los trabajadores. Este programa alternativo debe ser la base para unas PRIMARIAS DEL PUEBLO, a donde concurran todos aquellos que aceptan el programa (todos son todos). Sólo de esta manera les cortamos las alas a las cúpulas burocráticas sectarias que son los responsables del estrepitoso fracaso de las aspiraciones populares el 25 de octubre, el cual pretenden disimular apelando a una supuesta derechización del pueblo.
    saludos.

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    Amauta

    12/11/2015 at 03:10

  19. El amigo José Mercado se entrampa en generalidades e inexactitudes. El socialismo no es una continuación del capitalismo, sino su negación y surgirá sobre sus escombros.

    Seguramente la revolución triunfante en un país aislado (atrasado o avanzado, más probables es que sea atrasado) encontrará innumerables dificultades para construir el socialismo, muchas de las cuales serán imposibles de solucionar en condiciones de aislamiento y bloqueo imperialista.

    Este hecho N O D E S C A L I F I C A la posibilidad real y actual de que una revolución triunfante en un país pueda conquistar un GOBIERNO REVOLUCIONARIO DE LOS TRABAJADORES bajo la formas de un GOBIERNO DE LAS ASAMBLEAS POPULARES (GAP), donde la sostenibilidad y sustentabilidad de este gobierno se base en el PUEBLO ARMADO y en la PARTICIPACIÓN ACTIVA DE LA CIUDADANÍA EN LAS DECISIONES POLITICAS (que con el desarrollo del Internet Móvil encuentra infinitas posibilidades de operatividad, nunca antes vistas); Las que constituyen poderosas murallas para contrarrestar los embates del capitalismo interno y externo.

    En la situación en que viven los pueblos de Siria, El Kurdistán, etc. las condiciones están maduras para el triunfo de revoluciones

    Sólo bajo un GAP será posible poner en práctica una Economía Pública, Planificada y Bajo Control de los Trabajadores. Se trata de la economía pública pre-socialista de los primeros años de la revolución. Dependiendo del grado de desarrollo capitalista de la sociedad donde se opera el proceso revolucionario será necesaria la convivencia con una economía privada capitalista, pero sometida a las reglas del Poder Popular. Para el caso de un país atrasado económicamente es posible que esta convivencia dure varias años y que el sector privado ocupe por varios años un lugar importante en el conjunto de la economía. El sector privado de la economía dentro del proceso revolucionario siempre será un peligro de restauración capitalista. Sin embargo, ESTA VEZ el proletariado revolucionario estará dotado de poderosas herramientas para evitar dicha restauración.

    Esta economía pública de nuevo, bajo control real y efectivo de los trabajadores, absorverá paulatina y gradualmente a la economía privada y se diferenciará del estatismo burgués en que la economía pública distribuye los excedentes y utilidades entre los trabajadores, vía remuneraciones, gastos sociales, precios controlados, fondos de compensación para equilibrar rentabilidades entre los los distintos sectores económicos, etc, En el estatismo burgués gran parte de los excedentes y utilidades para a los bolsillos se una burguesía burocrática.

    saludos

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    Amauta

    12/11/2015 at 13:44

  20. Pues yo ni soy argentino ni sé mucho de marxismo. (pero me han recomendado mucho al sr. Astarita como autoridad en la materia los amigos que me hablan de su página) pero eso que ha dicho me sorprende.

    «el estatismo burgués (las estatizaciones son en sí progresistas), son prácticamente intocables. A esto hay que agregar que buena parte de la izquierda adhiere a la tácticas del programa transicional (se llega a extremo de defender consignas como el control obrero del Ejército). Todavía podría sumar otras cuestiones, como la tesis del estancamiento crónico del capitalismo; o la idea de que la URSS, China, etcétera, de alguna manera fueron “estados obreros”; o “socialismos reales”. Incluso desde el punto de vista teórico, la tesis del capitalismo monopolista, o del dominio de las finanzas sobre la producción, y semejantes, son casi “de sentido común” en la izquierda establecida.

    La realidad entonces es que no solo no convencimos a casi nadie, sino también tengo que reconocer que estas posiciones siguen dominando. Hace poco leía un escrito de un reconocido marxista argentino que decía, por ejemplo, que la caída del precio del petróleo fue organizada por EEUU para acabar con el chavismo y perjudicar a Cuba (el hombre debe de pensar también que el imperialismo organizó la caída del precio de la leche para perjudicar a Nueva Zelanda; o que en los 1990 organizó la caída de los precios del petróleo para joder a los gobiernos neoliberales, y así de seguido). Pero ideas de este tipo son aceptadas como naturales, tienen amplia aceptación en el público de izquierda “políticamente correcto”, y son las que arman el enfoque general de la política (lo de Atilio Borón se inscribe en la misma línea). No tendrán punto que ver con la teoría del valor y El Capital, pero a la mayoría eso los tiene sin cuidado»

    Dejando dicho desde el principio que yo no sé casi NADA del tema (pero como estudiante de economía me interesa) quisiera señalar que hasta donde yo tenía entendido las estatizaciones, el control obrero del ejército (y de la economía en general) la tesis del capitalismo monopolista, del dominio de las finanzas sobre la producción, etc SON las bases del pensamiento marxista en general. Y me ha sorprendido mucho leer que aquí se las pone en tela de juicio. Supongo que por mi propia ignorancia.

    Mucho me agradaría saber si me podrían poner un link a las explicaciones de porqué esos conceptos deben ponerse en tela de juicio desde un punto de vista marxista, a ver si aprendo algo.

    No lo pido para polemizar; sino para aprender.

    Muchas gracias.

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    ricardo

    12/11/2015 at 19:43

    • Para empezar con el estatismo burgués, aquí. Sobre estatismo y control obrero, aquí. El estatismo burgués puesto al servicio de la división y desmoralización de la clase obrera, aquí. Y buscando en el índice del blog, hay muchas más notas. Por ejemplo, las referidas a la estatización de YPF. También las notas sobre chavismo.

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      rolandoastarita

      12/11/2015 at 21:18

    • http://rolandoastarita.com/dt-Critica%20tesis%20de%20la%20financiarizacon.htm, ahí hay un texto de Astarita que es una crítica a la idea del mundo dominado por el capital financiero y la ambición de los banqueros. Creo q es uno de los textos que también a mi me ayudó a ver que existía «otro marxismo», un marxismo mucho más serio, realista y complejo.
      La serie de, si no me equivoco, 4 textos sobre la inflación en argentina son una hermosa y científica crítica a la idea simplista de las economías controladas por monopolios que fijan sus precios a su gusto. Y los textos de crítica al programa de transición incluyen, entre otras cuestiones, la crítica a planteos del tipo «reclamamos al estado burgués que haya un control obrero de las fuerzas armadas». Todo lo encontrarás en el índice. Muuuucho para leer. .

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      Gus

      12/11/2015 at 21:36

  21. https://www.facebook.com/La-Corriente-Fundadora-UNM-360333757417353/

    te recomiendo el video de esta chica de 18 años

    saludos

    carlos

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    carlos a. larriera

    13/11/2015 at 10:26

    • Es interesante que se envíe esto. Alguien que recuerda lo que sufrió en la crisis del 2001. Pero… ¿qué responsabilidad le cabe a la Convertibilidad y a las políticas aplicadas en los 1990? Más específico: ¿qué responsabilidad les cabe a los Scioli y Kirchner y tantos otros que hoy se presentan como salvadores de la patria? ¿Qué se dice sobre los que privatizaron el Banco de Santa Cruz, sobre los que votaban con las dos manos las privatizaciones de las cajas de jubilación y de YPF? ¿Qué se dice sobre la continuidad de estas políticas y la crisis del 2001? Respuesta: de eso no se habla.

      Además, ¿qué responsabilidad les cabe a los Sabatella, Gustavo López, Garré y similares que estuvieron luego en la Alianza? Respuesta: de eso tampoco se habla. Solo hay que hablar de lo que se sufría en el 2001. Así, de forma aislada, para que nadie piense en continuidades y responsabilidades profundas.

      Pero además, ¿qué se dice de la política con que se salió de la crisis del 2001? Respuesta: de eso tampoco se habla. No hay que decir que se salió de esa crisis a costa de un brutal ajuste, con una devaluación que llevó el dólar de $1 a $3,8. ¿Qué se dice sobre el hecho de que merced a ese brutal ajuste se recompuso la ganancia del capital, y cuando asumió Kirchner la economía crecía al 7%? Respuesta: nada, sobre eso también silencio.

      A todo esto, en la nota se presentan datos, todos convergentes, a una conclusión: el nivel de pobreza hoy en Argentina está a niveles similares a los que había a finales del gobierno de Menem. ¿Cómo se responde a esto? No hay respuesta. ¿Qué se dice de la relación entre la fabulosa renta que recibió Argentina en los 2000, producto de la mejora de los términos de intercambio, y el hecho bruto y descarnado de que hoy la pobreza está al nivel de 1999? Nada, no hay respuesta. En definitiva, hay que mandar un video para conmover y que no se piense en procesos, razones profundas e intereses de clase. Muy ilustrativo.

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      rolandoastarita

      13/11/2015 at 10:51

  22. De lo que se trata es del mejor escenario para desarrollar la lucha de clases. Si gana Macri sería absolutamente negativo. Esto ya fue establecido por Lenin y los bolcheviques en muchas resoluciones a través de los años. En la segunda vuelta, (en este caso ballotage), exclusivamente, en el caso de que puediera ganar la extrema derecha rusa (los centurionegristas) era legitimo acuerdos electorales con toda la democracia burguesa, incluso su ala derecha los kadetes. Hoy en la Argentina, siguiendo esta línea, todo marxismo consecuente debería votar en contra de Macri, o sea por el FPV.

    ver el artículo mío La izquierda y el ballotage, en wwwnudosgordianos.blogspot.com (sin punto entre www y nudos gordianos) o en Kaosenlared.net. Allí se citan las páginas de las obras completas de Lenin donde se establecieron las resoluciones de que hablo.

    carlos a. larriera

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    carlos a. larriera

    13/11/2015 at 17:12

    • Una buena muestra de cómo no hay que razonar en política. El análisis marxista es concreto, esto es, debe tener en cuenta la multiplicidad de las determinaciones. Cuando se analizan posiciones frente a otras fuerzas políticas esto es vital. De lo contrario se hace cualquier tipo de extrapolación arbitraria. La realidad es que las centurias negras era una organización zarista, que incluso organizaba progroms (persecuciones masivas contra los judíos). O sea, una especie de «fascismo» de la época. Los Kadetes eran representantes de la burguesía liberal; incluso participaron después de la caída del zar en el Gobierno Provisional.

      ¿Qué tiene que ver entonces esta diferencia entre kadetes y centurias negras con las diferencias entre Scioli y Macri? ¿O se pretende que está a las puertas un triunfo del fascismo, o de un régimen militar, si gana Macri? Puedo comprender que esta forma de razonamiento, que fue típica del PC, haya impregnado las conciencias en la izquierda. Pero me parece que debería haber algún límite para los disparates en las caracterizaciones. ¿O acaso hay que recordar qué es el fascismo, o el nazismo?

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      rolandoastarita

      13/11/2015 at 17:42

    • Agregado: es un error importante calificar de «fascista» sin ton ni son. Por ejemplo, acabo de leer que Bonafini llamó «facho» a Ricardo Lorenzetti, titular de la Corte Suprema. Esto es banalizar lo que fue el fascismo. Es hablar sin sentido. Y más grave es cuando este tipo de caracterizaciones se hacen desde una postura pretendidamente marxista.

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      rolandoastarita

      13/11/2015 at 17:54

  23. Precisamente, con los criterios extrapoladores que se utilizan sin ton ni son, también escuché la comparación de que Scioli es Kerensky y Macri es Kornilov. Un disparate. Generalmente, estos razonamientos vienen de ex-PC y PC, o de reformistas socialdemócratas, es decir, de gente que consideraba democrático a Videla y autoritario a Numa Laplane y por eso apoyaron a la dictadura genocida. Después, traidores como Athos Fava justifican la traición como un «error táctico». Llegan a posturas criminales usando el criterio del supuesto mal menor (personalmente pienso que la dirigencia del PCA -los que estén vivos- debería ser juzgada si se avanza con el juzgamiento de la pata civil de apoyo a la dictadura).

    Además, hay que decir que las centuriasnegras, como ya señaló Astarita, eran formaciones paraestatales para perseguir a los judíos pero también a la intelectualidad y a los revolucionarios. Durante la revolución de 1905/1907 Lenin va mucho más allá de la cuestión electoral y escribe toda una serie de intervenciones explicando la necesidad de la lucha armada contra los elementos reaccionarios del régimen zarista.

    Es más, dice todo lo contrario a lo que pretende Larriera. Lenin decía que: «Así, pues, tampoco Liebknecht pierde de vista los atropellos de la policía ni las leyes centurionegristas. Sin embargo, les dice a los obreros, audazmente: a lo que hay que temer no es a este enemigo, sino al acuerdo electoral con un falso amigo. ¿Por qué pensaba así Liebknecht? Porque consideraba siempre que la fuerza de los combatientes sólo es real cuando es la fuerza de las masas obreras con conciencia de clase. Y la conciencia de clase de las masas no es corrompida por los actos de violencia ni las leyes represivas, sino por los falsos amigos de los obreros, los liberales burgueses que, con frases huecas sobre la lucha, desvían a las masas de la auténtica lucha.» (PRÓLOGO A LA TRADUCCIÓN AL RUSO DEL FOLLETO DE W. LIEBKNECHT, ¡NADA DE COMPROMISOS, NADA DE ACUERDOS ELECTORALES!).

    No es muy bueno el ejemplo el ejemplo de Larriera.

    Otro que reflexionó sobre el mal menor fue Gramsci. Aún cuando se considerara como real desde el punto de vista de clase, un supuesto enfrentamiento entre derecha e izquierda o centro izquierda o progresismo o nacionalismo progresista, en el actual balotage, la situación de tener que optar sería la evidencia de que el kirchnerismo ha capitulado ante la derecha y no la fuerza que la combatirá.

    «El mal menor o el menos peor … El concepto de “mal menor” o de “menos peor” es de los más relativos. Un mal es siempre menor que uno subsiguiente mayor y un peligro es siempre menor que uno subsiguiente posiblemente mayor. Todo mal resulta menor en comparación con otro que se anuncia mayor y así hasta el infinito. La fórmula del mal menor, del menos peor, no es sino la forma que asume el PROCESO DE ADAPTACIÓN a un movimiento históricamente REGRESIVO, movimiento cuyo desarrollo es guiado por una fuerza audazmente eficaz, mientras que las fuerzas antagónicas (o mejor, los jefes de las mismas) están decididas a CAPITULAR PROGRESIVAMENTE por pequeñas etapas y no de un solo golpe (lo que tendría un significado muy distinto, por el efecto psicológico condensado, y podría hacer nacer una fuerza competidora activa contraria a la que pasivamente se adapta a la “fatalidad”, o reforzarla si ya existe).» (Antonio Gramsci, «Cuadernos de la cárcel», v. 5. p. 294).

    En fin, nada, nada, trabajador no vota patrón.

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    Lucas

    13/11/2015 at 18:52

  24. Bajo determinadas circunstancias puede resultar provechoso para los revolucionarios y las luchas populares aplicar el mal menor. Es un error absolutizar. «siempre es aplicable el mal menor» esta equivocado. «Nunca es aplicable el mal menor» también está equivocado.

    En la disputa Scioli / Macri ¿es aplicable el criterio del mal menor? mi respuesta es que no se dan las condiciones que lo ameriten.

    ¿En función de que se evalúan si las condiciones están dadas o no para aplicar el mal menor? En función de tu objetivo político. Si tu máxima aspiración política es la industrialización del país (capitalista, por cierto), entonces, probablemente, encontrarás alguna razón para apoyar a uno de los candidatos. En este sentido, otros tendrán como meta política la lucha contra la delincuencia, la prostitución, plenos derechos para las uniones homosexuales, evitar el indulto a los genocidas, etc. etc.

    Por lo que a mi respecta me pongo como meta política avanzar en los preparativos de una revolución en Argentina vía la movilización revolucionaria de las masas. En función de ello no veo de que manera una continuación del Kirchnerismo con Scioli pueda ayudar al respecto. .

    Las elecciones del 25 de octubre ha demostrado que en el terreno electoral la izquierda que levanta la bandera del socialismo (aunque sólo sea en el discurso) ha perdido posiciones. ¿Alguien se atreve a fundamentar lo contrario? Entonces, que ventajas reales y efectivas ha ofrecido el Kirchnerismo para que avance la alternativa socialista en la conciencia social del pueblo argentino. ¿Cual ha sido el gran avance que han logrado las fuerzas revolucionarias bajo los años de Kirchnerismo, que no lo hubieran logrado bajo otros gobiernos burgueses? Los hechos parecen demostrar que en los últimos años las fuerzas revolucionarias y el ímpetu de lucha de los trabajadores han perdido terreno. ¿Qué nos hace pensar que con el continuismo K de Scioli se va lograr recuperara terreno perdido y avanzar más? Si se perdió terreno con Cristina es lógico pensar que se seguirá perdiendo terreno con Scioli?

    En todo caso estoy abierto a recibir alguna razón seria que me pueda convencer que apoyar a Scioli pueda ayudar en los preparativos de la revolución. Ninguno de los argumentos presentados me convencen. Sigo pensando que sería un verdadero suicidio político que las fuerzas revolucionarias llamen a votar por Scioli.

    La alternativa es atrincherarse en las luchas obrero – populares, A partir de ahí acumulemos fuerzas revolucionarias en función de los preparativos. Ambos candidatos representan la misma amenaza en la represión de la protesta popular. No veo en Macrí una amenaza de exterminio en la presente etapa de la lucha de clases. Son dos facciones de la burguesía que se disputan el botín, en momentos en que los trabajadores continúan en su letargo por la debilidad de las fuerzas clasistas y combativas y la labor confucionista de la izquierda electorera neo – kautskysta.

    saludos.

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    Amauta

    13/11/2015 at 22:57

    • El problema, Amauta, es que la izquierda «revolucionaria» durante la campaña no utiliza la tribuna para proclamar su programa revolucionario, porque hablar de socialismo es «pianta votos». Es la fase superior del reformismo, es un reformismo en nombre de Trotsky.

      Yo me pregunto por ejemplo cuál hubiera sido el mal menor para los reformistas de Patria Grande, por ejemplo, si hubieran tenido que posicionarse en Rusia a principioa del siglo XX. ¿Habrían apoyado la derrota de Rusia en la primera guerra o habrían prestado su colaboración al zarismo para combatir al imperialismo alemán? ¿habrían combatido o apoyado al gobierno provisional? ¿habrían sostenido el derrotismo ante los japoneses? Creo que el reformismo «a lo PG» hubiera un sido rival acérrimo de los bolcheviques. Su método lo caracteriza. Pero creo que también hubieran estado del lado de los mencheviques los partidos del FIT. El grado de adaptación que muestran a la democracia burguesa es alarmante.

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      Lucas

      14/11/2015 at 09:49

  25. Muchas gracias por su respuesta. Estoy leyendo todo poco a poco. En cuanto pueda le diré lo que veo. Por de pronto me sorprende ver las diferencias entre lo que decía Marx y lo que dicen muchos marxistas (o que se consideran a sí mismos como tales) ahora. Tendré que ir un poquito despacio.

    Muchas gracias.

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    ricardo

    14/11/2015 at 19:37

    • No responden al planteo basico la profunda diferencia para que el proletariado desarrolle la lucha de clases entre un gobierno de Macri y otro del FPV.
      Rolando una comparación solo sirrve en uno o dos aspectos. Tomar el aspecto fascista de las centurias negras es no tener en cuenta lo central que eran tan ultraderecha como macri en cuanto al ataque a las condiciones económicas sociales y politicas del pueblo.
      No hay extrapolación arbitraria de mi parte.
      El analisis es bien concreto hay o no una diferencia radical de escenario.
      No me atribuyas las palabras de bonafini sobre lorenzetti con las que no estoy de acuerdo.
      Carlos a. Larriera

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      carlos a. Larriera

      15/11/2015 at 15:34

    • Por favor, trate de razonar con algo de lógica. Si Macri es «tan de ultraderecha» como las centurias negras, y las centurias negras apoyaban activamente al zarismo y atacaban al proletariado y a sectores de la población con métodos fascistas (esto es, propios de una guerra civil abierta), entonces usted está diciendo que Macri es fascista. Más aún, cuando habla de las condiciones para que la clase obrera desarrolle la lucha de clases, y hace referencia a Lenin, está implicado el mismo razonamiento.

      La diferencia cualitativa de condiciones que Lenin consideraba en relación a la lucha de clases era las que posibilitaba una democracia burguesa con respecto a un régimen feudal dictatorial. No entre dos variantes de la democracia burguesa que, por otra parte, en el caso que nos ocupa, apenas se distinguen. Esto último es una ocurrencia de los PC y afines para justificar la colaboración de clases. Ocurrencia que usted repite al pie de la letra. Y para colmo, quiere justificarla citando a Lenin, sacado de contexto (esto sin entrar a considerar que el método de argumentar citando una «autoridad» no es científico).

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      rolandoastarita

      15/11/2015 at 15:49

  26. Un saludo desde Chile. Aquí estamos vacunados hasta el cansancio de los argumentos del «mal menor» y el de «la amenaza de la derecha» (el cuco o el coco le dirán ustedes…

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    revolucho

    19/11/2015 at 16:20

  27. Magistral análisis. Pormenorizado, claro, conciso. Me aportó muchos datos que desconocía.

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    Leandro

    21/11/2015 at 19:00


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