Rolando Astarita [Blog]

Marxismo & Economía

Presentación de «Programas del Movimiento Obrero y Socialista»

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Aquí está la grabación de mi intervención en la presentación de Programas del movimiento obrero y socialista. Desde el Manifiesto Comunista hasta nuestros días, editorial Rumbos, Buenos Aires.

La presentación se realizó en la Feria del Libro el viernes 25 de abril. Compartí la mesa con Jorge Altamira, el historiador Daniel Gaido, y Pablo Heller, quien junto a Alejandro Guerrero y un equipo de colaboradores preparó la edición. Agradezco al lector del blog que grabó la intervención y tuvo la amabilidad de enviármela.

32 respuestas

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  1. Po: pragmatismo político oportunista + charlatanería teorica

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    GM

    29/04/2014 at 16:14

    • Admirable poder de síntesis. Pero habría que evaluar en forma un tanto más complexiva la presentación. De la intervención de Rolando, destaco el esfuerzo por desarrollar en un tiempo bastante breve la relación entre la dinámica real del capitalismo y el programa que ha de representar su subversión por parte del proletariado. El énfasis está correctamente puesto en que el desarrollo capitalista (inevitablemente mediado por crisis cíclicas) fortalece las bases materiales o estructurales de su superación, léase: Avance en la productividad social y crecimiento numérico del sujeto revolucionario. También el esfuerzo por presentar de un modo compatible con la armonía del encuentro, la crítica al dominio absoluto de los monopolios y el catastrofismo que de esta deriva, impugnando la lógica ‘transicional’ permanente. Lo de Gaido, fue un tanto mezclado. Rescato la vinculación de los programas obreros con la experiencia de lucha real del mismo y de como estos no son producto de elaboraciones geniales de gabinete, sino, aprehensión teórica de su lucha e iniciativa real. Me pareció muy objetable el paralelo que intentó establecer, entre medidas adoptadas por La Comuna, como la revocabilidad y la igualdad de salario al de un obrero, con el planteo del FIT. En el primer caso, era una medida revolucionaria adoptada por la dictadura del proletariado, en el segundo, es un pedido a ser cumplido por el estado burgués, lo que lo hace diferente en esencia. Incluso, en mi experiencia jamás vi que los parlamentarios obreros retiren el equivalente al salario de un obrero y pongan el resto a disposición de organismos de lucha de la clase obrera, sin distinción de banderías políticas y bajo control de asambleas independientes del partido. Lo de Altamira era previsible (en una intervención anterior indiqué que sería algo así como ‘Desde el Manifiesto al Programa del FIT’ ) y el compañero cumplió cabalmente con el pronóstico. Se deslizaron algunos amagues ‘autocríticos’ y algunas afirmaciones aventuradas. Lo primero: Un amague de despegue del programa del FIT aduciendo que no lo redactaron ellos (PO) y que les fue impuesto por el objetivo de no entorpecer la campaña. No se entendía bien, pero parecía que no estaban de acuerdo en la nacionalización de los jardines de infantes y la industria cosmética. Lo segundo: Estancamiento no implica catastrofismo. Dijo no coincidir con Trotski en este punto. Jamás le había escuchado o leído de su pluma o de otro cuadro de PO semejante afirmación. Por el contrario, leí muchas veces una profesión de fe ‘catastrofista’ y con todas las letras, aunque se afirmara la necesidad de la revolución proletaria para evadir la perspectiva de la barbarie. Tal vez se esté refiriendo a las palabras finales del viejo revolucionario, acerca del triunfo de la Cuarta Internacional. Muy por el contrario, Trotski asentó su enfoque programático en una perspectiva de declinación total de la sociedad, consecuente al estancamiento económico que extingue el fuego de la competencia y genera un impulso bélico ineluctable y la necesidad de la esclavización del proletariado.Solo hacia el final de su vida se concede el beneficio de la duda. En artículo inconcluso de 1940 especula con que la guerra que se avecina no conduciría inevitablemente a la catástrofe generalizada, sino, a un ‘respiro’ prolongado del capitalismo, tras el cual reincidiría en una nueva guerra, esa sí, devastadora. Es una perspectiva que adoptaron gran parte de las corrientes herederas del bolchevismo. Insisto, la ‘no igualdad’ entre estancamiento (crónico -agregamos- y ‘declinación’ o ‘decadencia’ fue un recurso retórico para evadir el planteo, medido por cierto, de Rolando. Otra cuestión fue endilgar al conjunto de la izquierda (salvo su propia corriente) la despreocupación por ‘actualizar’ el programa en razón de los cambios de escenario, históricos y políticos. Es una evidente falsedad, puesto que, si bien el conjunto del trotskismo permaneció aferrado a núcleo duro del PT ( bloqueo definitivo en las fuerzas de producción- crisis de dirección como impedimento a la revolución) abundaron las revisiones y ‘actualizaciones’ , como, por ejemplo, la perpetrada por Nahuel Moreno y Lambert, que el mismo Altamira se encargó de criticar antaño. El ejemplo sobre su ‘no catástrofismo’, fue la Comparación con el Sarmiento (después de un choque en Once la cosa no termina, está la calle Pueyrredon) fue una cosa muy banal, e incluso de mal gusto. Tengo que escucharlo de nuevo, espero haberlo hecho mal. Omito ironías por el respeto a las víctimas. Como muestra de la tendencia a la catástrofe, explicó que la restauración capitalista, que se decía que iba a rescatar al capitalismo, terminó en la crisis. Omite, precisamente, que la recuperación para el capitalismo de un tercio del planeta y sobremanera inmensas masas proletarias para la explotación directa del capital, estuvo en la base de una fuerte recuperación que antecedió a la actual crisis. Lo que se discute, no es la inevitabilidad de la crisis bajo el capitalismo, sino la crisis como un ‘contínuo’ como ‘crisis final’ . Esto es, precisamente, aquello de lo que no puede despegar. Para finalizar, el remate fue para alquilar balcones. Esta crisis, trae aparejada la revolución, pero, si lo juzgamos por el patrón subjetivo, su expresión es muy baja. El caso de Argentina constituye una ‘excepción’ un fenómeno ‘singular’ que, obviamente, se expresa en la ‘desperonización’ del proletariado y el ‘acto masivo’ que hará la izquierda, en contraposición a las catacumbas (aguantadero fue la expresión) en que se recluye la burocracia. Este fenómeno ‘singular’ es, como no puede ser de otra manera, el crecimiento electoral del FIT y por supuesto su programa (O manifiesto político, más del gusto de PO) que expresa la síntesis entre la evolución histórica del programa obrero y el escenario y tendencias actuantes en el marco concreto actual. ¿Puede haber mayor acto de exageración, impresionismo y autoproclamación política?

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      AP

      29/04/2014 at 23:05

    • AP, por favor, trate de hacer comentarios más breves. Incluso para la difusión de sus ideas, presentaciones tan largas (y para colmo, sin un punto y aparte siquiera) no lo favorecen.

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      rolandoastarita

      30/04/2014 at 09:34

  2. ja. Africa y las regiones pobres del Asia estan asi por la existencia del Socialismo. En esos paises casi no existe propiedad privada, libertad economica y empresarial.El Estado es dueño de casi todo, es el que manda y dirige, y ya son bastante conocidos cuales son los resultados.

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    AlvaroSC

    30/04/2014 at 00:56

    • Bueno, esa es una apreciación bastante estúpida, si se me permite. En el Imperio Egipcio no había ni libertad económica ni empresarial y construían unas ciudades de la puta madre, y podeían los mayores avances tecnológicos y culturales. Por poner un ejemplo bien preciso y claro.

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      J.D.

      30/04/2014 at 17:14

    • Otra cosa (y ahora sí, lo importante). África es grande, pero generalizado, en África lo que hay es la resaca de la colonización burguesa. O sea, si nosotros somos el «Tercer Mundo», África es el «Último Mundo» del Capitalismo. Acá no hay otra cosa, Capitalismo.

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      J.D.

      30/04/2014 at 22:29

    • Bien dice que todo Socialista es dictador en potencia. O sea segun tu apreciacion el ser humano no puede desarrollarse haciendo uso de su libertad, y siempre va a necesitar de estados dictatoriales, que apreciacion para tan tan estupida. Se nota que te gustan mucho las dictaduras y que te anden diciendo lo que tienes que hacer y no por voluntad propia…

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      AlvaroSC

      13/05/2014 at 21:52

  3. Disculpe compañero. Me dejé llevar y se hizo muy extenso. Tomo en cuenta su recomendación en cuanto a la puntuación.
    Saludos.

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    AP

    30/04/2014 at 10:55

  4. Estimado Rolando, le hago una pregunta descolgada si la puede responder. Según Wikipedia «…el comunismo implica el fin de la especialización en la división del trabajo y del dinero.». 1) ¿Usted se dice Comunista? 2) ¿Le parece bien (correcta) esa definición de Wikipedia? y 3) De ser así, ¿Cuál sería el beneficio de terminar con la especialización en la división del trabajo? Saludos.

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    Armando

    01/05/2014 at 00:41

    • Con respecto a lo que dice Wilkipedia, habría que aclarar que hay varios «comunismos» (incluso podría haber comunismos reaccionarios). En lo que respecta a las ideas de Marx, nunca leí que planteara como objetivo acabar con la división del trabajo; tampoco por parte de los marxistas, al menos los más citados. Sí hay una crítica a la división capitalista del trabajo (el embrutecimiento del trabajador a través de la condena a trabajos insoportablemente repetitivos y parciales, al estilo línea de montaje; pero esto también había sido criticado incluso por Adam Smith). En cuanto al dinero, el comunismo se plantea como ideal último acabar con el mercado. Pero esto no es una cuestión que pueda ser resuelta en un futuro más o menos cercano. El centro de la crítica marxista es a la explotación del trabajo por el capital, y a partir de aquí, la liberación del trabajo, a partir de la posesión colectiva de los medios de producción y del poder del Estado en manos de los productores. Cómo se organizarán los productores es algo que no puede ser resuelto a priori. La historia la hacen los seres humanos, no lo puede decidir ninguna vanguardia «esclarecida».
      Con respecto a si soy comunista, sí; aunque lamentablemente el término hoy está identificado con los regímenes stalinistas, me siento comunista con el significado que le da al término la obra de Marx y Engels. Las preguntas (2) y (3) están respondidas en lo anterior.

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      rolandoastarita

      01/05/2014 at 08:27

    • Gracias Rolando por su respuesta. Si me permite, yo creo que usted con su accionar ideológico está haciendo y decidiendo la historia. Ahora bien, yo no sé qué es la «vanguardia esclarecida”. ¿Marx no era vanguardia esclarecida? No sé, no me importa.
      Yo quiero ir a los conceptos. Explotación Capitalista. No entiendo en dónde la liberación de la explotación, la toma de las fábricas y la socialización del trabajo, conducen a (o son la vía a) el fin del mercado, el comunismo, etc. No logro ver la transición. Quisiera que me la explique, si es posible, en qué momento y cómo las fábricas socializadas se desmercantilizan. Y si no lo hacen, ¿cómo hacen para poder competir contra las fábricas o usinas en donde la explotación aún existe y la productividad y las tasas de ganancia son superiores? Y si se desmercantilizan y con ellas se desmercantiliza el mundo, entonces se daría directamente lo que a priori no se podía dar, que es el fin del mercado. Pero eso no sería posible según su apreciación, sin aquella transición que yo advierto contrafáctica o inviable. Lo que yo veo es que la liberación de la explotación, la toma de las fábricas, de conciencia y la socialización del trabajo, etc; no deben ser dirigidos hacia el socialismo, sino directamente hacia un campo comunista, anarquista o cómo quiera llamársele.

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      Armando

      01/05/2014 at 13:24

    • Escribe:

      «Lo que yo veo es que la liberación de la explotación, la toma de las fábricas, de conciencia y la socialización del trabajo, etc; no deben ser dirigidos hacia el socialismo, sino directamente hacia un campo comunista, anarquista o cómo quiera llamársele.»

      Pero que usted «vea» esto no implica nada, sobre nada.

      Saludos.

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      Gerardo Daniel

      01/05/2014 at 17:15

    • No es lo que «veo», es lo que es. Por más que tengas todas las empresas sin explotación, si siguen compitiendo entre sí, ¿cómo termina eso? Y si todas las empresas no estuvieran socializadas, entonces las socializadas tendrían que competir contras las no socializadas, con la desventaja de no poseer la capacidad de productividad de estas.

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      Armando

      01/05/2014 at 19:39

    • Armando: y no entiendo la diferencia entre socialismo y comunismo. El socialismo es otra forma de decir «primera etapa del comunismo» ¿no es así? Entonces ya es comunismo (o socialismo, o como que se le quiera llamar). Sobre esta etapa: no entiendo cómo se hará para evitar que el nuevo sistema económico colectivista no termine en manos de una burocracia y no se repita lo que sucedió en la URSS. No veo muchos marxistas que estén buscando en las causas de lo que sucedió para impedir que se repita. En el video (de 24:20 a 25:20) se vuelve a repetir que sin que el partido político («la corporización de la experiencia histórica de la clase obrera») conquiste el poder político, los obreros no pueden conquistar el poder político. Y se repite otra vez lo mismo: que la clase obrera no desarrolla ni siquiera conciencia revolucionaria sin estos individuos esclarecidos por su forma de organización o por lo que fuera. O sea: que la conciencia de clase del proletariado es sindicalista, y que el comunismo es algo que nace (no se sabe cómo) de la clase obrera, vive afuera (en un grupo de iluminados pequeñoburgueses) y vuelve a ella bajo la forma de un partido revolucionario «obrero». Así la organización de la dictadura del proletariado es otra vez piramidal: los esclarecidos deben ir arriba y conducir a los inferiores. Y no sólo guiarlos, sino mandarlos. Es el partido el que conquista el poder político, no la clase obrera en sí. Lo dejan bien claro. Hasta dice que la clase obrera hace revoluciones, pero parece que inconscientes. Los comunistas son los únicos conscientes. Pero no se entiende cómo pueden hacer revoluciones inconscientes si se supone que lo único que los obreros hacen cuando están solos es sindicatos. ¿Qué es esto si no es una «vanguardia esclarecida»? El partido debe ser represivo con la clase obrera si se muestra reaccionaria, y entonces la lucha contra la restauración del capitalismo es siempre una lucha del partido con otras facciones y no puede esperar de ninguna resistencia obrera al partido algo más revolucionario que el propio partido, con lo cual los comunistas deben controlar (dirigir, incitar, vigilar y reprimir) al proletariado. Todas las revoluciones comunistas leninistas fueron organizadas por partidos que entrenaron obreros y sindicatos propios. Los mismos partidos se pusieron en el poder. Si es necesario todo este elitismo leninista entonces quiero saber cómo harán los marxistas para impedir que el autoritarismo de los revolucionarios no vuelva a generar una «clase» a manos de una burocracia estalinista, o de una burocracia revisionista, etc. No entiendo cómo no pueden hacer programas políticos que prevengan el asunto, pero las burocracias pueden hacer supuestas contrarrevoluciones en la revolución.
      Así que me uno al comentario de Armando: si se elimina a todos los capitalistas el capital ya no compite y no forma valor, si se elimina al capital y la ley del valor el mercado no puede funcionar, y si se elimina al mercado el dinero es un bono que funciona mal. Y yo todavía no entiendo cómo puede haber propiedad colectiva de los medios de producción sin una institución colectiva que la controle. Y si hay que obedecer a esta institución por la fuerza, es un Estado.

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      Maku

      02/05/2014 at 06:37

    • Responder todos los problemas e inexactitudes que contiene su comentario me llevaría demasiado espacio. De todas maneras, aclaro que sostener la necesidad de un partido marxista no es sinónimo de defender la dictadura de ese partido sobre la clase obrera. De hecho, existen muchos partidos y corrientes que se reclaman defensoras del socialismo y partidarias de la liberación de la explotación. Es natural, por otra parte, que para defender ciertas ideas, la gente se agrupe en partidos. Marx jamás sostuvo que un partido debiera imponerse al resto por medio de la violencia o la fuerza.

      Personalmente, soy partidario de esta idea. En ningún momento de mi intervención sostuve que un partido marxista tiene que imponer sus ideas a la clase obrera por la fuerza. En todas las notas en que critico a los regímenes stalinistas, sostengo que el socialismo no puede imponerse por la fuerza. En este sentido, es intelectualmente deshonesto pretender englobar a todos los marxistas en una misma bolsa. Los soldados y obreros del Kronstadt reivindicaron un programa de democracia obrera con el que muchos marxistas acordamos. Lo mismo puede decirse de las tradiciones de la Comuna, o de los Consejos obreros de Alemania, en el período revolucionario.

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      rolandoastarita

      02/05/2014 at 09:51

    • Estimado Rolando: conozco su posición. Me refería más bien a la que dejó bien clara Daniel Gaido. Por ende no los pongo a Gaido y a usted en la misma bolsa, pero pareciera que a nadie le preocupa que se cite a Lenin sin siquiera hacer una nota al pie, una toma de distancia. Porque fueron Lenin y Trotsky los que primero escribieron contra la democracia obrera en el sentido que usted defiende, y los que mandaron a los marinos de Kronstadt a la picadora de carne junto con toda la tradición de la Comuna de París. Por eso vuelvo a preguntar: ¿tiene su posición un programa político que prevenga que lo mismo se repita? Porque para eso en vez de citar Qué hacer debería escribirse alguna vez un Qué no hacer. Esto no empieza con el stalinismo sino con el leninismo, por lo menos.

      En cuanto a los partidos, yo no hablé de que sea algo malo organizarse en partidos. Lo que digo es que los partidos marxistas son por lo general leninistas y el resultado frecuente es que cada uno quiere ser el último detentador del poder. Cuando las papas queman los que pueden alcanzar una cuota de poder se excomulgan mutuamente y se proclaman cada uno la representación de los intereses políticamente organizados del proletariado. No sé si Marx quiso decir esto último en el Manifiesto, pero Lenin y Trotsky sin duda lo entendieron así.

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      Maku

      03/05/2014 at 14:10

  5. Armando. Creo que hay una confusión entre ‘transición’ y ‘socialismo’. El socialismo presupone la abolición de la sociedad de clases y esto no puede darse sin la abolición de la propiedad capitalista a nivel global. Entre este y el comunismo, media la capacidad social de dar a cada uno en función de su necesidad. De momento, es lo que tengo en mente, no se que opinan otros compañeros.

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    AP

    01/05/2014 at 23:07

    • Básico,
      El socialismo sería una sociedad Sin Explotación, Con Mercado.
      El Comunismo es una sociedad, Sin Explotación y Sin Mercado.

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      Armando

      01/05/2014 at 23:54

    • AP: yo creo que no se puede dar a cada uno en función de su necesidad sin la abolición completa de la sociedad mercantil. Adhiero al comentario de Armando. No creo que una empresa socializada pueda competir en un mercado contra la productividad mayor de una empresa capitalista (incluyo en las empresas capitalistas a las de obreros que se autoexplotan para servir a un mercado de consumo). Sólamente funcionando como un todo colectivo pueden las empresas socializadas competir con la economía capitalista, y para eso deben pautar previamente qué será producido, tanto con otros productores como con los consumidores. Suponemos que esta planificación será más eficiente que la de las burocracias soviéticas. Porque si no es así entonces la clase obrera no ayuda a desarrollar más las fuerzas productivas que la capitalista y su explotación es irremediable.

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      Maku

      02/05/2014 at 06:25

  6. Armando. Para nada básico. En su acepción clásica, el socialismo presupone la abolición del mercado. A partir de la destrucción del estado burgués, se abre una etapa de transición revolucionaria en que el proletariado, erigido en clase dominante, desarrolla un proceso de expropiación de la burguesía y alternativamente, de control o administración obrera de la producción en razón de un plan democráticamente acordado. Junto con la desaparición de la propiedad privada se desarrolla una transformación en la conciencia y cultura de la población y la desaparición de las clases se acompaña de una extinción de los medios políticos de coacción sobre la los remanentes de las fuerzas contrarevolucionarias. Durante este período de transición hacia el socialismo, la planificación económica debe imbricarse con la democracia concejista de los trabajadores y formas supervivientes de mercado. En el socialismo, que, por otra parte, no puede realizarse en un solo país ( No basta con que Stalin decrete instaurado el socialismo por decreto en 1936) sino a nivel mundial, el mercado ya no existe. La sociedad es íntegramente productora de valores de uso. Los productores aportarán al fondo social en razón de su productividad y recibirán de esta (una vez descontado lo necesario para sostener y ampliar la producción) el equivalente de su producto. En una fase más avanzada, las condiciones serán tales que se podrá avanzar hacia una completa igualdad, otorgando a cada quien lo necesario para cubrir las diferentes necesidades con independencia de la cuantía de su aporte. En la sociedades de transición, la existencia de explotación, puede asociarse a la coexistencia con formas capitalistas que sobreviven de modo controlado. Pero también puede ocurrir que, el poder pase de manos del proletariado a las de un estrato dominante: La burocracia. Esto fue lo que, efectivamente, ocurrió en la URSS. La burocracia explotaba al proletariado, pero a través de un mecanismo de extracción del excedente, diferente al que opera bajo el capitalismo. En la medida que una revolución no ocurra o se extienda a los centros capitalistas avanzados, su industria no podrá equiparar la productividad arrancada por el látigo capitalista y sufrirá directa o indirectamente dicha presión en el mercado mundial.

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    AP

    02/05/2014 at 18:19

  7. ¿Así que no tienen programa? La razón de ser del trotkismo es el Programa de Transición que escribió Trotsky hace décadas y que sus herederos aplicaron de mil maneras en infinidad de momentos y lugares. El Programa de Transición es un programa que tiene premisas económicas y políticas equivocadas, y un modo de hacer política pensado para que su militancia se transforme en dirección revolucionaria de las masas, cosa que nunca se hizo realidad –ni siquiera como dirección del movimiento obrero. Y es la reivindicación de la metodología transicionalista la que ha hecho de esta corriente una secta política –más allá de cualquiera revisión o actualización. Que considero progresiva en relación al estalinismo, pero como a toda la izquierda también en los noventa se le cayó el muro encima, y la cuestión es que no surgen nuevas ideas. Por supuesto, aunque no lo sigo mucho me pareció una novedad que Altamira señale públicamente alguna crítica a Trotsky, pero tampoco para ilusionarse porque no olvidemos que se trata de una “razón de ser”. Pero uno nunca sabe donde terminan las cosas cuando entran las dudas. ¿El FIT no tiene programa? Estaba convencido que lo tenían, en más lo leí y lo escuche, lo de siempre. Pero la verdad no se exactamente que quiso haber dicho o a dónde quiere llegar Altamira con este punto, ni me parece importante especular sobre un asunto que permanece en lo inmediato bajo un interés puramente trotskista, de los tres grupos que lo componen. Lo llamativo es que si no tuvieron programa ¿qué estuvieron haciendo en la campaña?

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    Omar

    03/05/2014 at 01:54

    • No. Compañero. No se confunda. Lo de Altamira fue un recurso retórico. No está marcando ningún cambio de fondo. Ni siquiera una apertura. El punto de vista de PO sigue siendo tan catástrofista como siempre. Es más, hacen de ello una bandera. En la misma vena retórica (‘demostrar’ con palabras el espíritu crítico para estar a tono con el panel) se refirió a que el trotskismo ( a excepción de ellos) no actualizó su programa de origen y que incluso el programa del FIT no era el más deseable, dado que, no contó con su concurso. El FIT sí tiene un programa, que consiste en hacer pasar la transición por el parlamento. Sería algo así como la manifestación ‘exotérica’ apta para consumo de las masas, de la versión esotérica propia a los iniciados de la secta. Me da la impresión que no vio el video. Hay que hacer el esfuerzo y después sacar conclusiones. Para eso está puesto y es lo que motiva opiniones críticas.
      Saludos

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      AP

      03/05/2014 at 11:10

    • Yo creo que hay que revisar la historia del movimiento, los partidos y la gente de izquierda, en Argentina. Yo no lo voy a hacer, por que no me interesan la investigación ni el análisis pormenorizado; pero ¿no hay un antes y un después, de la la izquierda, luego de la última dictadura cívico-militar? ¿No entró la izquierda, luego de este proceso, en un estado de «decaimiento», «descreimiento», «desconfianza», etc’s, en los cuales continúa? ¿No hay una traición en la izquierda?

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      Armando

      04/05/2014 at 15:53

    • Armando: lo que ud. propone se está haciendo desde décadas, pero si quiere conocer lo que se está haciendo alrespecto, va a tener que molestarse en emprender la lectura.
      Respuestas a esos interrogantes hay muchas, va a tener que cotejarlas y usar su criterio para ver cuales son las que más se acercan a a la realidad

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      Roberto P.

      05/05/2014 at 08:30

  8. Prof. Astarita:
    Nunca tuve el privilegio de haber sido estudiante suyo (la nomenclatura «alumno»,-sinceramente-, me resulta poco feliz; no me considero alguien sin luz). Sin embargo, luego de haber visto el video, no tengo más que palabras de agradecimiento. El hecho que usted haya compartido una mesa redonda con Jorge Altamira, me resulta absolutamente esperanzador. Dos intelectuales de vasta trayectoria, que saben leer los textos de Marx, Engels, Lenin y Trotsky de manera crítica, no conservadora, no dogmática, el hecho que ambos lean a los padres del socialismo (independientemente que, muchos, no consideren a Lenin y a Trotsky como tales- ni siquiera como sus vástagos-), revolucionariamente, me da placer. Qué orgullo profesor. Espero haya más encuentros de este tipo…No quisiera, se me acusara de rendir «culto a la personalidad», pero qué privilegio tener a usted y a Jorge en una misma mesa. Debo reconocer -en post de la honestidad intelectual que, intento, me corone-, con usted, tengo mis diferencias ideológicas, políticas y programáticas; no obstante y -más allá del carácter subsanables de ellas-, lo encuentro como uno de los intelectuales más destacados del país.
    Lo saludo de manera afectuosa, Ezequiel.
    P.D.: Continúe con su labor, prosiga la producción de sus escritos, robustecerán la doctrina marxista (¡somos una doctrina, no un dogma!); siga siendo un revolucionario.

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    Ezequiel

    06/05/2014 at 05:35

    • Compañero Ezequiel. Con razón decía Lenin que a veces es preferible escuchar la voz ruda del enemigo que el dulce arrullo comunista. Su deferencia parece afectada y teatral. No comparto su criterio de que Jorge Altamira haya manifestado una actitud ‘no dogmática’. En esencia es ‘cambiar algunas cosas, para que todo siga igual’. No tengo nada en contra de que se realicen mesas de ese tipo y si satisfacen las expectativas hedonistas de mucha gente, mejor. Pero a los efectos de la confrontación de posiciones, me parecería mucho más fructífero un debate directo de cara a la vanguardia. Algo que de momento, no se avizora. Rolando Astarita ha presentado una crítica profunda al programa trotskista y sus fundamentos teóricos. Hasta ahora no ha merecido más que algún libelo de soslayo. Sería interesante que el PO abriera un curso de debate real en el que puedan participar todos los compañeros interesados. Eso sí, resultaría esperanzador. De momento, no lo veo. Confieso que me sabe mal lo de ‘siga siendo un revolucionario’. Parece un ‘certificado de buena conducta’ , en este caso, ante mortem.

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      AP

      06/05/2014 at 11:07

  9. AP: A usted que le da la impresión que otros no vieron el video, me parece que lo mismo resulta para usted. Altamira señala que el manifiesto político del Frente de Izquierda lo escribió prácticamente el PO en soledad, sin el concurso del resto de los partidos. Esto en primer lugar. En segundo, el PO esbozo un programa que no ha sido discutido o abordado por el resto de las fuerzas de izquierda. Lo invito a que lo lea y haga una devolución: Tesis programáticas de la CRCI 2004. Lo que aporta el compañero Altamira, y me parece que usted no comprendió, es que desarrollemos un debate a partir de la discusión de un programa. Manos a la obra!

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    Juan M

    06/05/2014 at 13:11

    • Compañero Juan M. Lo que dice Altamira es que El programa del FIT se elaboró sin su concurso y que se aceptó dadas las premuras de la campaña y la necesidad de priorizar esta tarea. Justamente, para subsanar esta insuficiencia, se elaboró el ‘Manifiesto político’ como aporte para mejorar. De todos modos, como todos podemos equivocarnos, voy a volver a ver el video y de ser el caso, rectifico el punto, sin que esto invalide los argumentos medulares de mi análisis, Caso contrario, ratifico en toda línea. Las tesis de la CRCI las leí hace mucho, pero no puedo debatir esto aquí sin salirme del tópico ni abusar de la paciencia del moderador del blog. Tengo en claro que proponen debatir en torno a un programa. Pero el debate está encorsetado en cuanto a su carácter transicional.

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      AP

      06/05/2014 at 15:58

  10. Compañero Juan M. Volví a ver el fragmento en cuestión. Sostengo que mi primer impresión interpreta correctamente lo dicho al principio y que le reiteré antes. Invito a volver a ver el video. Transcribo: ‘ Un amague de despegue del programa del FIT aduciendo que no lo redactaron ellos (PO) y que les fue impuesto por el objetivo de no entorpecer la campaña. No se entendía bien, pero parecía que no estaban de acuerdo en la nacionalización de los jardines de infantes y la industria cosmética’. Vuelvo a transcribir:’Compañero Juan M. Lo que dice Altamira es que El programa del FIT se elaboró sin su concurso y que se aceptó dadas las premuras de la campaña y la necesidad de priorizar esta tarea. Justamente, para subsanar esta insuficiencia, se elaboró el ‘Manifiesto político’ como aporte para mejorar’.
    Me parece que el video no lo vio usted o le prestó poca atención.
    Saludos

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    AP

    06/05/2014 at 16:15

    • Estimado AP: Aguardo la critica a las tesis de la CRCI, para desarrollar un debate. Que el moderador del blog, sea en todo caso, el que defina si corresponde o no.
      Saludos

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      Juan M

      12/05/2014 at 14:23

  11. Compañero Juan M. En absoluto le rehuyo a cualquier debate, por lo menos respecto del cual me siento medianamente preparado. Lo que ocurre es que este blog tiene reglas, amplias por cierto, pero reglas al fin, que, un debate de esas características claramente extralimita. En trazo grueso, el programa del CIRCI (Que debería releer) se encuadra dentro del campo de los programas trotskistas ‘actualizados’, vale decir, que pretenden conservar el método del Programa de Transición de Trotski, tomando en cuenta el estado actual de la lucha de clases. Una respuesta directa, ameritaría un desarrollo extenso y ya me han llamado la atención por esto, en otras ocasiones. En este blog hubo una intensa discusión en la nota sobre ‘Fuerzas productivas y programa trotskista’ que puede buscar en el índice y leer, si no lo ha hecho aún y encontrará en comentarios, los elementos centrales de mi posición. Si aún así, esta interesado en que le acerque una apreciación específica del programa que particularmente lo representa, no tiene más que publicar un mail o establecer una tribuna de discusión externa y no tengo inconvenientes, en un lapso prudencial, en darle a conocer mi análisis y crítica.
    PD: No tengo ningún problema en que sea el moderador quien decida, pero no quiero ser yo quien lo ponga en ese compromiso, por que no me parece sea lo adecuado.
    Saludos

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    AP

    12/05/2014 at 18:25

    • Un debate de este tipo excede una sección como esta, que son comentarios a notas. Podrían organizarlo en otro lugar, me parece lo más apropiado.

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      rolandoastarita

      12/05/2014 at 20:18


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